Movimientos Latinoamericanos de vanguradia
El Vanguardismo: va contra la realidad primaria, quiere crear otra realidad. Los vanguardistas transformaron los géneros literarios y elogiaron la fragmentación. Aquí encontramos autores de gran renombre a nivel mundial, como Jorge Luís Borges, Luís Vidales, Pablo Neruda, Nicolás Guillén y César Vallejo.
La vanguardia latinoamericana, no sólo luchaba contra una estética pasada, sino también contra la permanencia de un mundo postcolonial y feudal. En estas circunstancias no es difícil pensar en una vinculación de la crítica de los valores culturales con las ideas de la revolución social. Porque, al fin y al cabo, América Latina soñó con la parafernalia de los vanguardistas europeos y ello les hizo verse a sí mismos y buscar el carácter de su propio entorno.
Ese retorno a sí mismo dio lugar a algunas manifestaciones que suponen un regreso a lo antiguo desde la óptica de la modernidad. Una de sus características es la conjugación estética y política, cuestión que descarta la teoría de que existen dos vanguardias en Latinoamérica: una vanguardia artística que se asemeja a una aventura formalista, gratuita y subjetiva; y una vanguardia revolucionaria que pretende cambiar las estructuras políticas y económicas del país mediante una estética realista para el gran público.
Ambas realizaciones responden a un mismo deseo o necesidad de acercar la literatura a la vida, de rechazar la literatura anterior y señalar las injusticias y fallos de la sociedad burguesa. A esto se suma la tendencia en Latinoamérica de poner la literatura al servicio de las ideas y de la acción política.
El Creacionismo:
Vicente Huidobro (poeta chileno) fue creador del movimiento llamado "Creacionismo" y lo hizo pensando en la idea de alejarse de la realidad y de la vida. Esto lo logró con sus poemas que en cierto modo se escapaban de la realidad pero que luego volvían a ella. Entonces hubo un cambio en la forma de crear poesía, teniendo como objetivo echar a volar la imaginación pero siempre poniendo límites.
A comienzos del siglo XX en el creacionismo hubo un gran cambio en el arte con respecto a lo que ya había, debido a que se empezaron a crear cosas diferentes que obligaban al artista a basarse en la abstracción.
El hecho que llevó a crear este movimiento, fue el haberse dado cuenta que en ese momento los artistas sólo estaban imitando lo que ya había y que además lo encontraban bien, pero nunca pensaron en que ellos también podían crear otras realidades que las que los rodeaba. Gracias al creacionismo entonces comienzan a darse cuenta que se podían crear poemas con un estilo propio e individual, estilos que no se confunden con la forma tradicional de hacer poesía. Para lograr todo esto, Huidobro se aleja de lo que es normal en la naturaleza. Entonces decide no imitarla, es por eso que este creador no pide que el poeta cante a la lluvia sino que el poeta haga llover. A partir de esto se consigue una poesía diferente. Este poeta con su pensamiento no sólo influye en la poesía sino también lo hace en la pintura, la música, las artes plásticas, el cine y toda clase de creación artística.
El Estridentísmo:
Nace en México entre los años 1920 y 1925, encabezado por Manuel Maple Arce y List Arzubide, se forma bajo las teorías del futurismo italiano de Marinette. Vicente Quirarte hizo la siguiente apreciación sobre el estridentísimo: Ha sido un movimiento en constante estudio, valoración y crítica ya que cada generación le ha dado una lectura diferente. Entre sus principales aportaciones, podríamos citar el haber sido una invitación a la irreverencia, a crear un universo lúdico y estratégico como movimiento de vanguardia, que cuestionaba la literatura misma, la escritura, la actividad intelectual. Surgió como una necesidad de mirar mas allá de lo establecido, y de quitarle el almidón a la cultura, cuyos representantes se atrevieron a ser traviesos e irreverentes pero siempre con una inteligencia brillante.
Vanguardia y realismo están unidos indisolublemente en la obra de List Arzubide. En el libro citado el autor considera de forma natural la relación de loa estridentístas con los movimientos sociales.
La intención de la estética estridentístas era generar emociones según consta en sus manifiestos, documentos y entrevistas concedidas por sus integrantes. En la confrontación de los artistas contemporáneos contra los estridentístas, nace, según Arzubide, el menosprecio y el silencio al que han sido sometidos, lo segundo por los herederos de los primeros. El primer enfrentamiento que los estridentístas tuvieron con los contemporáneos fue cuando ellos se dieron cuenta de que eran los reflejos del pasado y, sobre todo, del gobierno que nunca ha cumplido lo que el pueblo desea. El estridentísmo ha dado al porvenir la creación de una forma nueva de hacer poesía. Todas las vanguardias del siglo XX a excepción del propio estridentísmo, cumplieron con su función eventual de mandar al destierro el antiguo régimen estético: el estridentísmo fue puente entre el modernismo y sus resabios y puertas especialmente del asentamiento de un nuevo modo de concebir el arte de la plástica o de la palabra, donde sentó sus reales el grupo de los contemporáneos.
El Ultraísmo:
Movimiento poético de vanguardia surgido de las tertulias que iniciara Rafael Cansinos-Assens en el café colonial de Madrid a finales de 1918 y como reacción contra el amaneramiento de los seguidores del modernismo de Rubén Darío. Así lo explica un ultraísta como Guillermo de torre: como una violenta reacción contra la era del rubenianismo agonizante y toda su anexa de cantores fáciles que habían llegado a formar un género híbrido y confuso, especie de bisutería poética, producto de feria para las revistas burguesas. Opinión semejante tiene Jorge Luis Borges, quien, no obstante, acabara renegando de sus orígenes ultraístas. Fue importante en su gestación, además, el paso del poeta chileno Vicente Huidobro y su defensa del creacionismo. El movimiento se difundió a través de varias revistas, entre las que se encuentran Los Quijote, Grecia, Cervantes, Ultra, cosmópolis, Horizontes, Vértices, entre otras. Además de los antecedentes españoles, entre los que se mencionan a Ramón Gómez de la Sema y Juan Ramón Jiménez, es importante destacar la relación del ultraísmo con los movimientos coetáneos de vanguardia: el futurismo, el cubismo, el dadaísmo. Son sus rasgos fundamentales: la condensación metafórica, la eliminación de nexos inútiles, el avance de la “imagen refleja o simple”, según los comentarios de Gerardo Diego, hacia la “imagen múltiple” que supone la identificación más plena entre poesía y música, el valor plástico de la disposición tipográfica, herencia directa de los caligramas de Apollinare. Los poetas ultraístas más notorios fueron, además de los ya citados: Juan Larrea, Pedro Garfias, Adriano del Valle, Eugenio Montes, José Rivas Panedas, Rafael Lasso de la Vega, Isaac Vando-Villar, entre otros. El movimiento quedo disuelto al dejar de publicarse públicamente la revista Ultra en la primavera de 1922.
El Boom Latinoamericano:
Fue un movimiento literario que surgió desde los años 1960 y 1970, cuando el trabajo de un grupo de novelistas latinoamericanos relativamente joven, ampliamente distribuido en Europa y en todo el mundo. El boom está más relacionado con los autores Julio Cortázar de Argentina, Carlos Fuentes de México, Mario Vargas Llosa de Perú, Gabriel García Márquez y José Ortiz de Colombia, y José Donoso de Chile . Estos escritores desafiaron las convenciones establecidas de la literatura latinoamericana. Su trabajo es experimental y debido al clima político de la América Latina de la década de 1960, (la Revolución Cubana). Las novelas del boom son esencialmente modernistas. Tratan al tiempo de una manera no lineal, suelen utilizar más de una perspectiva o la voz narrativa y cuentan con un gran número de neologismos (la acuñación de nuevas palabras o frases), juegos de palabras e incluso blasfemias. Como escribe el escritor Pope, en referencia al estilo de la Pluma: "Se basaba en una superposición cubista de diferentes puntos de vista, hacía tiempo y el progreso lineal cuestionable, y que era técnicamente complejo. Lingüísticamente segura de si misma, se utiliza la lengua vernácula, sin excusas." Otras características notables del Boom son el tratamiento de los ajustes, tanto rural y urbano", el internacionalismo, el énfasis tanto en la histórica y la política, así como "interrogatorio de regionales, así como, o más, identidad nacional, el conocimiento de hemisferio en todo el mundo, así como las cuestiones económicas e ideológicas; polémicas, y la oportunidad." literatura Boom rompe las barreras entre lo fantástico y lo mundano, la transformación de esta mezcla en una nueva realidad. De los escritores del boom, Gabriel García Márquez está más estrechamente relacionada con el uso del realismo mágico, de hecho, se le atribuye traerlo "de moda" después de la publicación de Cien años de soledad en 1966.
AUDICIÓN: ROSARIO CASTELLANOS
(Ciudad de México, 1925 - Tel Aviv, 1974) Narradora y poeta mexicana, considerada en este segundo género la más importante del siglo XX en su país. Durante su infancia vivió en Comitán (Chiapas), de donde procedía su familia. Cursó estudios de letras Universidad Nacional Autónoma de México. En Madrid complementaría su formación con cursos de estética y estilística.
Una absoluta sinceridad para poner de manifiesto su vida interior, la inadaptación del espíritu femenino en un mundo dominado por los hombres, la experiencia del psicoanálisis y una melancolía meditabunda constituyen algunos elementos definitorios de su obra. Su poesía, en la que destacan los volúmenes Trayectoria del polvo (1948) y Lívida luz (1960), revela las preocupaciones derivadas de la condición femenina.
En los trabajos tardíos de este género, habla de su experiencia vital, los tranquilizantes y la sumisión a que se vio obligada desde la infancia por el hecho de ser mujer. Hay en sus poemas un aliento de amor mal correspondido. Su mundo narrativo toma muchos elementos de la novela costumbrista. Las novelas Balún Canán (1957) y Oficio de tinieblas (1962) recrean con precisión la atmósfera social, tan mágica como religiosa, de Chiapas. El argumento de la segunda, una premonitoria rebelión indígena en el estado de Chiapas inspirada en un hecho real del siglo XIX, surgió de una toma de consciencia de la situación mísera del campesinado de esa región mexicana, y de su abandono a los caciques locales por parte del gobierno federal.
En el filo del gozo
I Entre la muerte y yo he erigido tu cuerpo: que estrelle en ti sus olas funestas sin tocarme y resbale en espuma deshecha y humillada. Cuerpo de amor, de plenitud, de fiesta, palabras que los vientos dispensan como pétalos, campanas delirantes al crepúsculo. Todo lo que la tierra echa a volar en pájaros, todo lo que los lagos atesoran de cielo más el bosque y la piedra y las colmenas. (Cuajada de cosechas bailo sobre las eras mientras el tiempo llora por sus guadañas rotas). Venturosa ciudad amurallada, ceñida de milagros, descanso en el recinto de este cuerpo que empieza donde termina el mío.
II Convulsa entre tus brazos como mar entre rocas, rompiéndome en el filo del gozo o mansamente lamiendo las arenas asoleadas. Bajo tu tacto tiemblo como un arco en tensión palpitante de flechas y de agudos silbidos inminentes. Mi sangre se enardece igual que una jauría olfateando la presa y el estrago pero bajo tu voz mi corazón se rinde en palomas devotas y sumidas.
III Tu sabor se anticipa entre las uvas que lentamente ceden a la lengua comunicando azúcares íntimos y selectos. Tu presencia es el júbilo. Cuando partes, arrasas jardines y transformas la feliz somnolencia de la tórtola en una fiera expectación de galgos. Y, amor, cuando regresas el ánimo turbado te presiente como los siervos jóvenes la vecindad del agua.
Jaime Sabines
Su padre, Julio Sabines, nació en el Líbano en 1902 y emigró con sus padres y sus dos hermanos a Cuba. En 1914 llegó a Chiapas, donde conoce a su futura esposa, Luz Gutiérrez Moguel.
Jaime Sabines mantuvo la paz y la poesía al mismo tiempo: las personas lo amaban y apreciaban su orgullo de ser poeta. Jaime Sabines tuvo una infancia normal, fue jugador de trompo, canicas y baloncesto. Declamador desde la primaria, lo fue oficialmente en la secundaria.
En 1945 viajó a la Ciudad de México para comenzar sus estudios como médico, pronto se dio cuenta de que la carrera de medicina no era para él, en ese momento es cuando comienza su carrera de escritor. Regresó a Chiapas por una corta temporada y estuvo trabajando en la mueblería de su hermano Juan.
En 1953 se casó con Josefa Rodríguez Zebadúa, con quien tuvo cuatro hijos: Julio, Julieta, Judith y Jazmín.
Falleció el 19 de marzo de 1999 en la Ciudad de México, víctima del cáncer, a la edad de 72 años.
El poeta
Sus primeros pasos por la poesía fueron "Instrospección", "A mi madre", "Siento que te pierdo" y "Primaveral", los anteriores fueron publicados en el periódico El Estudiante, una publicación de las sociedades estudiantiles de la Escuela Normal y de la Preparatoria de Tuxtla Gutiérrez.
En 1949 regresa a la Ciudad de México para ingresar a la licenciatura en «Lengua y literatura española» en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Nacional Autónoma de México.
Entre sus influencias literarias se cuentan Pablo Neruda, García Lorca y James Joyce.
-¿Se daba cuenta de las influencias que se apoderaban de su escritura o no las percibía?
-¡Claro que me daba cuenta de que esos poemas no eran míos! Son obras de García Lorca o son obras de Neruda, me decía a mí mismo. Pero poco a poco empecé a escribir cosas diferentes... fui notando que ya era una voz propia que se iba abriendo paso entre tantas influencias.
(Ana Cruz, "La poesía es un destino".)
En 1949 nace Horal, poemario que inicialmente constaría de 62 poemas, pero que el autor recortó unos días antes de viajar a Tuxtla. La publicación corrió a cargo del Gobierno de Chiapas en 1950 en una edición muy modesta con 18 poemas.
En 1951 es publicado su libro titulado La Señal. En el año de 1952 regresa a Chiapas debido a que su padre sufre un accidente, por lo tanto no puede terminar su carrera. Sin embargo, en 1952 aparece su libro Adán y Eva, su primera incursión en la poesía en prosa, del que afirmó:
Yo quería hacer una poesía lo más independiente de las palabras, que resistiera cualquier traducción y es a través de la prosa, -cuyo ritmo es el que más se acerca al de la sangre- donde se consigue mejor".
En 1954 se publicó uno de sus libros, quizá el menos entendido en su país y el más apreciado fuera de él, Tarumba. Sabines sufre un accidente al caer por una escalera, en él se rompió una pierna y se fracturó la cadera, con lo que dio comienzo una vida de sufrimiento y de dolor.
Después de siete años de vivir en Tuxtla, regresa a la Ciudad de México en donde escribe Diario Semanario. En el año de 1966 muere su madre, Doña Luz Gutiérrez, y en 1967 se publica la primera edición de Yuria.
Jaime Sabines era conocido como "El francotirador de la literatura" por pertenecer a un grupo que transformaba la literatura en realidad. Sus escritos se basaron en su presencia en diversos lugares cotidianos como la calle, hospitales, patios, etcétera.1
El político
Fue diputado federal por el I Distrito Electoral Federal de Chiapas a la L Legislatura de 1976 a 1979 y diputado en el Congreso de la Unión en 1988 por el Distrito Federal . Fue calificado por el presidente de México, Ernesto Zedillo, como uno de los más importantes poetas del país en el siglo XX.
Tiene un poema en el que condensa su impresión sobre su propia actividad política:
Estoy metido en política
Estoy metido en política otra vez.
Sé que no sirvo para nada, pero me utilizan
Y me exhiben
“Poeta, de la familia mariposa-circense,
atravesado por un alfiler, vitrina 5”.
(Voy, con ustedes, a verme)
Bibliografía
• Horal (1950)
• La Señal (1951)
• Adán y Eva (1952)
• Tarumba (1956)
• Diario Semanario y poemas en prosa (1961)
• Poemas Sueltos (1951-1961)
• Yuria (1967)
• Tlatelolco (1968)
• Maltiempo (1972)
• Algo sobre la muerte del Mayor Sabines (1973)
• Otros Poemas Sueltos (1973-1994)
• Nuevo Recuento de Poemas (1977)
• Los amorosos Cartas a Chepita 2009
Premios recibidos
• 1959 Premio Chiapas, El Ateneo de Ciencias y Artes de Chiapas.
• 1973 Premio Xavier Villaurrutia por Maltiempo.2
• 1983 Premio Nacional de Literatura.3
• 1986 Premio Juchiman de Plata[1]
Autoevaluación de la clase:
En el día de hoy socializamos la consulta sobre los movimiento vanguardistas latinoamericanos y escuchamos a Jorge Sabines y Rosario Castellanos, en ésta clase no pude estar por motivos familiares, pero sé estuvo buenas pues realizaron una visista al Museo de Arte Moderno de Medellín (MAMM)es otra actividad que hace de las clases algo más dinámico y divertido.
Espero que se sigan dando esta clase de acontecimientos pues como lo he dicho antes ésto rompe por completo con la linealidad del curso, creo que la clase en general es buena pues el profesor además de aportarnos un gran conocimiento, nos alegra un poco con el buen humor y eso es bueno pues se traspasa esa línea tan estricta que existe antre profesores y alumnos, claro está que esto no es motivo para perderle el respeto.
miércoles, 29 de septiembre de 2010
miércoles, 22 de septiembre de 2010
portafolio de desempeño
JORGE FRANCISCO ISIDORO LUIS BORGES
(Buenos Aires, 24 de agosto de 1899 – Ginebra, 14 de junio de 1986) fue un escritor argentino, uno de los autores más destacados de la literatura del siglo XX. Publicó ensayos breves, cuentos y poemas. Su obra, fundamental en la literatura y en el pensamiento humano, ha sido objeto de minuciosos análisis y de múltiples interpretaciones, trasciende cualquier clasificación y excluye cualquier tipo de dogmatismo.1
Se lo ha presentado como uno de los eruditos más grandes del siglo XX, lo cual no impide que la lectura de sus escritos suscite momentos de viva emoción o de simple distracción. Ontologías fantásticas, genealogías sincrónicas, gramáticas utópicas, geografías novelescas, múltiples historias universales, bestiarios lógicos, silogismos ornitológicos, éticas narrativas, matemáticas imaginarias, thrillers teológicos, nostálgicas geometrías y recuerdos inventados son parte del inmenso paisaje que las obras de Borges ofrece tanto a los estudiosos como al lector casual. Y sobre todas las cosas, la filosofía, concebida como perplejidad, el pensamiento como conjetura, y la poesía, la forma suprema de la racionalidad. Siendo un literato puro pero, paradójicamente, preferido por los semióticos, matemáticos, filólogos, filósofos y mitólogos, Borges ofrece -a través de la perfección de su lenguaje, de sus conocimientos, del universalismo de sus ideas, de la originalidad de sus ficciones y de la belleza de su poesía- una obra que hace honor a la lengua española y la mente universal.2
Ciego a los 55 años, personaje polémico, con posturas políticas que le impidieron ganar el Premio Nobel de Literatura al que fue candidato durante casi treinta años, Borges siempre soñó con que la posteridad le perdonara sus errores y le concediera la gloria de que se lo recordase por sus mejores textos.
Borges consideraba que había heredado dos tradiciones de sus antepasados: una militar y otra literaria. Su árbol genealógico lo entronca con ilustres familias argentinas de estirpe criolla y anglosajona, como también portuguesa. Desciende de varios militares que tomaron parte activa en la Independencia Argentina, como Francisco Narciso de Laprida, que presidió el Congreso de Tucumán y firmó el Acta de la Independencia; Francisco Borges Lafinur -su abuelo paterno- fue un coronel uruguayo; Edward Young Haslam -su bisabuelo paterno- fue un poeta romántico que editó uno de los primeros periódicos ingleses del Río de Plata, el Southern Cross; Manuel Isidoro Suárez -su bisabuelo materno- fue un coronel que luchó en las guerras de la Independencia; Juan Crisóstomo Lafinur -su tío abuelo paterno- fue un poeta argentino autor de composiciones románticas y patrióticas y profesor de Filosofía; Isidoro de Acevedo Laprida -su abuelo materno- fue un militar que luchó contra Juan Manuel de Rosas.4
Su padre, Jorge Guillermo Borges, fue un abogado argentino, nacido en la provincia de Entre Ríos, que se dedicó a impartir clases de psicología. Era un ávido lector y tenía aspiraciones literarias que concretó en una novela, El caudillo, y algunos poemas; además tradujo a Omar Jayyam de la versión inglesa de Edward Fitzgerald. Para 1970, Jorge Luis Borges recordaba con estas palabras a su padre: «El me reveló el poder de la poesía: el hecho de que las palabras sean no sólo un medio de comunicación sino símbolos mágicos y música».5 Su madre, Leonor Acevedo Suárez, era uruguaya. Aprendió inglés de su marido y tradujo varias obras de esa lengua al español. La familia de su padre tenía orígenes españoles, portugueses e ingleses; la de su madre, españoles y posiblemente portugueses. En su casa se hablaba tanto en español como en inglés.6
Borges nació el 24 de agosto de 1899 a los ocho meses de gestación, en una típica casa porteña de fines del siglo XIX, con patio y aljibe, dos elementos que se repetirán como un eco en sus poesías. Su casa natal estaba situada en la calle Tucumán 840, pero su infancia transcurrió un poco más al norte, en la calle Serrano 2135 del barrio de Palermo. La relación de Borges con la literatura comenzó a muy temprana edad, siendo que a los cuatro años ya sabía leer y escribir. Debido a que en su casa se hablaba tanto español como inglés, Borges creció como bilingüe.6 7En 1905 comenzó a tomar sus primeras lecciones con una institutriz británica.[a] Al año siguiente escribió su primer relato, La visera fatal, siguiendo páginas del Quijote. Además, esbozó en inglés un breve ensayo sobre mitología griega. A los nueve años tradujo del inglés El príncipe feliz, de Oscar Wilde, texto que se publicó en el periódico El País rubricado por Jorge Borges (h).7 En el barrio de Palermo, que por aquella época era un barrio marginal de inmigrantes y cuchilleros, conoció las andanzas de los compadritos que después poblaron sus ficciones. Borges ingresó al colegio directamente en el cuarto grado.8 El inicio de su educación formal a los 9 años y en una escuela pública fue una experiencia traumática para Borges, los compañeros se mofaban de aquel sabelotodo, que llevaba anteojos, vestía como un niño rico, no se interesaba por los deportes y hablaba tartamudeando. Durante los cuatro años de su permanencia en ese colegio, Borges no aprendió mucho más que algunas palabras en lunfardo y varias estrategias para pasar desapercibido.9
En 1914 el padre de Borges se vio obligado a dejar su profesión, jubilándose de profesor debido a la misma ceguera progresiva y hereditaria que décadas más tarde afectaría también a su hijo. Junto con la familia, se dirigió a Europa para someterse a un tratamiento oftalmológico especial. Para refugiarse de la Primera Guerra Mundial, la familia se instaló en Ginebra (Suiza), donde el joven Borges y su hermana Norah —nacida en 1902— asistirían a la escuela. Borges estudió francés y cursó el bachillerato en el Liceo Jean Calvin.8 El ambiente en aquel establecimiento de inspiración protestante era completamente distinto al de su anterior escuela de Palermo, sus compañeros, muchos de ellos extranjeros como él, apreciaban ahora sus conocimientos e inteligencia y no se burlaban de su tartamudez.10 Durante esa época leyó sobre todo a los prosistas del Realismo francés y a los poetas expresionistas y simbolistas, especialmente a Rimbaud. A la vez, descubrió a Schopenhauer, a Nietzsche, a Carlyle y a Chesterton. Con la sola ayuda de un diccionario aprendió por sí mismo el alemán y escribió sus primeros versos en francés.8
Gracias al fin de las hostilidades y después del fallecimiento de la abuela materna, la familia Borges marchó a España en 1919. Inicialmente se instalaron en Barcelona y luego se trasladaron a Palma de Mallorca. En esta última ciudad Borges escribió dos libros que no publicó: Los ritmos rojos, poemas de elogio a la Revolución rusa, y Los naipes del tahúr, un libro de cuentos. En Madrid y en Sevilla participó del movimiento literario ultraísta, que luego encabezaría en Argentina y que influiría poderosamente en su primera obra lírica. Colaboró con poemas y en la crítica literaria en las revistas Ultra, Grecia, Cervantes, Hélices y Cosmópolis.
En esta época conoció a su futuro cuñado, Guillermo de Torre, y a algunos de los principales escritores españoles de la época, como Rafael Cansinos-Assens —a quien frecuentaba en el famoso Café Colonial y a quien siempre consideró su maestro— Ramón Gómez de la Serna, Valle Inclán y Gerardo Diego.8
Inicios de su carrera literaria
El 4 de marzo de 1921, junto con su abuela paterna —Frances Haslam, quien se les había unido en Ginebra en 1916— sus padres y su hermana, Borges embarcó en el puerto de Barcelona en el Reina Victoria Eugenia, que los devolvería a Buenos Aires. En el puerto los esperaba el escritor, filósofo de la paradoja y humorista surreal Macedonio Fernández, cuya amistad Borges habría de heredar de su padre. El contacto con Buenos Aires llevó al poeta a una relación exaltada de «descubrimiento» con su ciudad natal. Así comenzó a dar forma a la mitificación de los barrios suburbanos, donde asentaría parte de su constante idealización de lo real. Ya en Buenos Aires publicó en la revista española Cosmópolis, fundó la revista mural Prisma (de la que sólo se publicaron dos números) y también publicó en Nosotros, dirigida por Alfredo Bianchi. Por esa época conoció a Concepción Guerrero, una joven de dieciséis años de quien se enamoró. En 1922 visitó a Leopoldo Lugones junto a Eduardo González Lanuza para entregarle el último número de Prisma. En agosto de 1924 fundó la revista ultraísta Proa junto con Ricardo Güiraldes, autor de Don Segundo Sombra; Alfredo Brandán Caraffa y Pablo Rojas Paz, aunque paulatinamente iría abandonando esa estética.8 12 En 1923, en víspera de un segundo viaje a Europa, Borges publicó su primer libro de poesía, Fervor de Buenos Aires, en el que se prefigura, según palabras del propio Borges, toda su obra posterior. Fue una edición preparada apuradamente, en la que se colaron algunas erratas y que, además, carecía de prólogo. Para la tapa su hermana Norah realizó un grabado. Se editaron unos trescientos ejemplares; los pocos que se conservan son considerados tesoros por los bibliófilos y en algunos se aprecian correcciones manuscritas realizadas por el mismo Borges. En Fervor de Buenos Aires es donde emotivamente confesó que, finalmente, «las calles de Buenos Aires/ya son mi entraña». Son treinta y tres poemas tan heterogéneos que aluden a un juego de cartas (el truco), o al tirano Juan Manuel de Rosas, o a la exótica Benarés; sin ahorrar el espacio para solazarse en un patio anónimo de Buenos Aires, «en la amistad oscura/ de un zaguán, de una parra y de un aljibe». Sobre el espíritu de este libro ha escrito Borges que «en aquel tiempo buscaba los atardeceres, los arrabales y la desdicha».12
Después de un año en España e instalado definitivamente en su ciudad natal a partir de 1924, Borges colaboró en algunas revistas literarias y con dos libros adicionales, Luna de enfrente e Inquisiciones —que nunca reeditó— establecería para 1925 su reputación de jefe de la más joven vanguardia. En los siguientes treinta años Borges se transformaría en uno de los más brillantes y más polémicos escritores de América. Cansado del ultraísmo que él mismo había traído de España, intentó fundar un nuevo tipo de regionalismo, enraizado en una perspectiva metafísica de la realidad. Escribió cuentos y poemas sobre el suburbio porteño, sobre el tango, sobre fatales peleas de cuchillo, como Hombre de la esquina rosada y El puñal. Pronto se cansó también de este «ismo» y empezó a especular por escrito sobre la narrativa fantástica o mágica, hasta el punto de producir durante dos décadas —desde 1930 a 1950— algunas de las más extraordinarias ficciones del siglo XX: Historia universal de la infamia, Ficciones, El Aleph, entre otros.6 7
Más tarde colaboró, entre otras publicaciones, en Martín Fierro, una de las revistas clave de la historia de la literatura argentina de la primera mitad del siglo XX. No obstante su formación europeísta, reivindicó temáticamente sus raíces argentinas, y en particular porteñas, en poemarios como Fervor de Buenos Aires (1923), Luna de enfrente (1925) y Cuaderno de San Martín (1929). Compuso letras de tangos y milongas, si bien rehuyó «la sensiblería del inconsolable tango-canción» y el manejo sistemático del lunfardo, que «infunde un aire artificioso a las sencillas coplas». En sus letras y algunos relatos se narran las dudosas hazañas de los cuchilleros y compadres, a los que muestra en toda su despojada brutalidad aunque dentro de un clima trágico, cuando no casi épico.
En 1930 Borges publicó el ensayo Evaristo Carriego y prologó una exposición del pintor uruguayo Pedro Figari. Además, conoció a un joven escritor de solo 17 años, que luego sería su amigo y con el que publicaría numerosos textos, Adolfo Bioy Casares.13 En el primer número de la revista Sur, dirigida por Victoria Ocampo, Borges colaboró con un artículo dedicado al coronel Ascasubi. En este primer número, publicado en 1931, también contribuyeron la propia Victoria Ocampo, Waldo Frank, Alfonso Reyes Ochoa, Jules Supervielle, Ernest Ansermet, Walter Gropius, Ricardo Güiraldes y Pierre Drieu la Rochelle.7 Borges publicó dos años más tarde una colección de ensayos y crítica literaria titulada Discusión, la que abarca temas tan diversos como la poesía gauchesca, la Cábala, temas filosóficos, el arte narrativo y hasta su opinión sobre clásicos del cine. El 12 de agosto de 1933 comenzó a dirigir, junto con Ulyses Petit de Murat, la Revista Multicolor de los Sábados, suplemento cultural impreso a color del diario populista Crítica que duraría hasta octubre de 1934.14 En 1935 editó Historia universal de la infamia, una serie de relatos breves, entre ellos, Hombre de la esquina rosada.15 Allí sigue interesado en el perfil mítico de Buenos Aires iniciado en Evaristo Carriego. Al año siguiente se publicaron los ensayos de Historia de la eternidad, donde —entre otros temas— Borges indaga sobre la metáfora. En la revista quincenal El Hogar, comenzó a publicar la columna de crítica de libros y autores extranjeros hasta 1939. Allí publicó quincenalmente gran cantidad de reseñas bibliográficas, biografías sintéticas de escritores y ensayos. Colaboró también en la revista Destiempo, editada por Adolfo Bioy Casares y Manuel Peyrou, con ilustraciones de Xul Solar. Para la editorial Sur tradujo A Room of One’s Own, de Virginia Woolf y al año siguiente la novela Orlando de la misma autora. En 1937 publicó Antología clásica de la literatura argentina.
El Borges vanguardista y más tarde terruñero pasó, en la década de los 30, al Borges de la revista Sur, con su cosmopolitismo de alto vuelo; al Borges metafísico que especuló sobre el tiempo y el espacio y lo infinito, la vida y la muerte y si hay destino para el hombre; al Borges que hace alardes de erudición y que ya pergeña sus celebérrimos textos trampa: comentarios exhaustivos, por ejemplo, de libros que no existen, o relatos que juntan y mezclan lo real con lo ficticio. También se percibe un cambio en materia de estilo, una labor de poda en las prosas y los metros, que pasan a ser más clásicos, más nítidos, más sencillos.16
Los años finales de esta década fueron funestos para Borges: primero vino la muerte de la abuela Fanny; después, la del padre, precedida de una muy lenta y penosa agonía.17 Borges se vio arrojado de una vez pero contundentemente al mundo de los adultos responsables. Tenía que hacer lo que todos hacían desde edades bastante más tempranas: trabajar, sacar adelante una familia. En esto tuvo suerte: con la ayuda del poeta Francisco Luis Bernárdez, consiguió en 1938 un empleo en la biblioteca municipal Miguel Cané del barrio porteño de Almagro. En esta poco concurrida biblioteca pudo seguir haciendo lo que solía, pasarse los días entre libros, leyendo y escribiendo.16 Después, el mismo Borges sufrió un grave accidente, al golpearse la cabeza con una ventana, lo que lo llevó al borde de la muerte por septicemia y que, oníricamente, reflejará en su cuento El sur. En la convalecencia escribió el cuento Pierre Menard, autor del Quijote. Esos sueños de convaleciente le sirvieron para escribir páginas espléndidas; fantasiosas pero tramadas por su inconfundible mente de siempre, lúcida y penetrante. Borges salió del trance afianzado en la idea que venía rumiando desde hacía tiempo: que la realidad empírica es tan ilusoria como el mundo de las ficciones, pero inferior a éste, y que sólo las invenciones pueden suministrarnos herramientas cognoscitivas confiables.18
En 1940 publicó Antología de literatura fantástica, en colaboración con Bioy Casares y Silvina Ocampo, quienes ese mismo año contrajeron matrimonio, siendo Borges el testigo de su boda. Prologó, además, el libro de Bioy Casares La invención de Morel.6 14 Publicó en 1941 Antología Poética Argentina y editó el volumen de narraciones El jardín de senderos que se bifurcan, obra con la que se hizo acreedor al Premio Nacional de Literatura. Al año siguiente apareció Seis problemas para don Isidro Parodi, libro de narraciones que escribió en colaboración con Bioy Casares. Lo firmaron con el seudónimo «H. Bustos Domecq», el cual proviene de «Bustos», un bisabuelo cordobés de Borges, y «Domecq», un bisabuelo de Bioy Casares. Bajo el título Poemas (1923-1943) reunió en 1943 la labor poética de sus tres libros más los poemas publicados en el diario La Nación y en la revista Sur. Presentó, junto con Bioy Casares, la antología Los mejores cuentos policiales. Para esta época, Borges ya había logrado un espacio en el reducido círculo de la vanguardia literaria argentina. Su obra Ficciones recibió el Gran Premio de Honor de la Sociedad Argentina de Escritores (SADE). En sus páginas se halla Tlön, Uqbar, Orbis Tertius, sobrecogedora e insuperable metáfora del mundo.14
En una reunión en la casa de Bioy Casares y Silvina Ocampo, Borges conoció en agosto de 1944 a Estela Canto, una joven atractiva, inteligente, cultivada y poco convencional, que llamó su atención —acostumbrado a tratar en los círculos literario y social con mujeres convencionales de la clase media o alta— y de quien se enamoró sin ser correspondido. Estela era una mujer vanidosa y hasta su muerte se ufanaba de haber conquistado el amor, y después la amistad de Borges, así como de haber sido la destinataria de una colección de cartas de amor que mostraban hasta qué punto el autor de Ficciones, que detestaba el sentimentalismo en la literatura, podía ser profundamente sentimental en la vida.19 En su libro de memorias, Canto escribió:
La actitud de Borges me conmovía. Me gustaba lo que yo era para él, lo que él veía en mí. Sexualmente me era indiferente, ni siquiera me desagradaba. Sus besos torpes, bruscos, siempre a destiempo, eran aceptados condescendientemente. Nunca pretendí sentir lo que no sentía20
La figura de Estela le inspiró a Borges ciertos aspectos de El Aleph, uno de sus mejores cuentos. El le dedicó a ella ese relato y le regaló el manuscrito original, el cual Estela hizo subastar cuatro décadas más tarde en Sotheby y fue vendido en más de 25.000 dólares a la Biblioteca Nacional de España.19 Desafiando a su madre, para quien Estela era una desclasada, Borges le propuso casamiento. Ese amor no consumado, siempre agónico, terminó de morir hacia fines de 1952.21
En colaboración con Silvina Bullrich publicó El compadrito en 1945. Junto con Bioy Casares publicó en 1946 Un modelo para la muerte utilizando el seudónimo «B. Suárez Lynch» y, como H. Bustos Domecq, Dos fantasías memorables, volumen de historias de suspenso policial. Borges aclaró posteriormente que «Suárez» provenía de su abuelo y que «Lynch» representaba el lado irlandés de la familia de Bioy. Fundó y dirigió la revista Los Anales de Buenos Aires (que concluiría, tras 23 números, en diciembre de 1948). En la publicación, Borges y Bioy colaboraron con un nuevo seudónimo: «B. Lynch Davis». Entre 1947 y 1948 editó el ensayo Nueva refutación del tiempo y publicó sus Obras Escogidas. En 1949 se editó su célebre obra narrativa El Aleph, libro de género fantástico y que para la crítica es casi unánimemente su mejor colección de relatos.22
En 1946 Juan Domingo Perón fue elegido presidente, venciendo así a la Unión Democrática. Borges, que había apoyado a ésta última, se manifestaba abiertamente en contra del nuevo gobierno. Su fama de antiperonista lo acompañó toda su vida. Respecto al nuevo gobierno, que Borges consideraba una dictadura, manifestó:
Las dictaduras fomentan la opresión, las dictaduras fomentan el servilismo, las dictaduras fomentan la crueldad; más abominable es el hecho de que fomenten la idiotez. Botones que balbucean imperativos, efigies de caudillos, vivas y mueras prefijados, ceremonias unánimes, la mera disciplina usurpando el lugar de la lucidez... Combatir estas tristes monotonías es uno de los muchos deberes del escritor ¿Habré de recordar a los lectores del Martín Fierro y de Don Segundo Sombra que el individualismo es una vieja virtud argentina?
Borges se sintió obligado a renunciar a su empleo como bibliotecario cuando fue designado «Inspector de mercados de aves de corral» por el gobierno. Su madre y su hermana, también antiperonistas, fueron detenidas por la policía.[b] Borges fue llevado por la necesidad a convertirse en conferencista itinerante por diversas provincias argentinas y Uruguay. Para ello, debió superar su tartamudez y su timidez con ayuda médica. La necesidad también lo llevó a iniciarse en la tarea docente como profesor de literatura inglesa en el Instituto Libre de Segunda Enseñanza y, más tarde, en la Universidad Católica.22
Jorge Luis Borges en 1951.
Los albores de la década de 1950 marcaron el inicio del reconocimiento de Borges dentro y fuera de Argentina. La Sociedad Argentina de Escritores lo nombró presidente en 1950, cargo al que renunciaría tres años más tarde. Dictó conferencias en la Universidad de la República de Uruguay, donde apareció su ensayo Aspectos de la literatura gauchesca. Editó en México Antiguas literaturas germánicas, escrito en colaboración con Delia Ingenieros. También en ese mismo año se publicó en París la primera traducción francesa de su narrativa (Fictions) y en Buenos Aires la serie de cuentos La muerte y la brújula. En 1952 aparecieron los ensayos de Otras inquisiciones y se reeditó un ensayo sobre lingüística porteña titulado El idioma de los argentinos, junto con El idioma de Buenos Aires de José Edmundo Clemente. Apareció también la segunda edición de El Aleph, con nuevos cuentos. Algunas narraciones de este libro fueron traducidas al francés por Roger Caillois y publicadas en París en 1953 con el nombre de Labyrinthes. Ese año Borges publicó El Martín Fierro, ensayo que tuvo una segunda edición dentro del año. Bajo el cuidado de José Edmundo Clemente, la editorial Emecé comenzó a publicar sus Obras Completas. En 1954 el director cinematográfico Leopoldo Torre Nilsson dirigió el film Días de odio, basado en el cuento de Borges Emma Zunz.23
Tras un golpe militar —denominado Revolución Libertadora— que derrocó al gobierno peronista, Borges fue elegido en 1955 director de la Biblioteca Nacional, cargo que ocuparía por espacio de 18 años. En diciembre de ese mismo año fue designado miembro de la Academia Argentina de Letras. Publicó Los orilleros, El paraíso de los creyentes, Cuentos breves y extraordinarios, Poesía gauchesca, La hermana Eloísa y Leopoldo Lugones. Se le confirmó, además, en la cátedra de Literatura Alemana y, luego, como director del Instituto de Literatura Alemana en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Buenos Aires. La revista Ciudad le dedicó un volumen crítico y bibliográfico sobre su obra. Apareció Ficciones en italiano, bajo el título La Biblioteca di Babele. Tras varios accidentes y algunas operaciones, un oftalmólogo le prohibió leer y escribir. Aunque aún distinguía luces y sombras, esta prohibición cambió profundamente su práctica literaria. Borges se fue quedando ciego como consecuencia de la enfermedad congénita que había ya afectado a su padre. El hecho no fue repentino («Se ha extendido desde 1899 sin momentos dramáticos, un lento crepúsculo que duró más de medio siglo»)24 ), sino que más bien se trató de un proceso; como fuere, esto no le impidió seguir con su carrera de escritor, ensayista y conferencista, así como tampoco significó para él el abandono de la lectura —hacía que le leyesen en voz alta— ni del aprendizaje de nuevas lenguas.23 El haber sido nombrado director de la Biblioteca Nacional y, en el mismo año, comprender la profundización de su ceguera fue percibido por Borges como una contradicción del destino. Él mismo lo relató en una conferencia dos décadas más tarde: «Poco a poco fui comprendiendo la extraña ironía de los hechos. Yo siempre me había imaginado el Paraíso bajo la especie de una biblioteca. Ahí estaba yo. Era, de algún modo, el centro de novecientos mil volúmenes en diversos idiomas. Comprobé que apenas podía descifrar las carátulas y los lomos. Entonces escribí el Poema de los dones»:25
Nadie rebaje a lágrima o reproche
esta declaración de la maestría
de Dios, que con magnífica ironía
me dio a la vez los libros y la noche.26
En 1956 dictó el curso de literatura inglesa en la Universidad de Buenos Aires, fue nombrado catedrático titular en la misma universidad, recibió un doctorado Honoris Causa de la Universidad de Cuyo y fue nombrado presidente de la Asociación de Escritores Argentinos. En Montevideo criticó ásperamente al peronismo depuesto y defendió a la Revolución Libertadora. Por su adhesión al nuevo gobierno resultó muy criticado, entre otros, por Ernesto Sabato y Ezequiel Martínez Estrada. Sabato y Borges continuarían, si bien no enemistados, «separados» por motivos políticos hasta 1973, cuando, a raíz de un encuentro casual en una biblioteca, Orlando Barone resolvió promover una serie de reuniones, en las que ambos escritores discutieron sobre literatura, filosofía, cine, lingüística y demás temas. El resultado de estas reuniones fue la edición de un libro: Diálogos: Borges-Sabato.23
Entre 1957 y 1960 publicó Manual de zoología fantástica y El Hacedor, una colección de textos breves y poemas dedicada a Leopoldo Lugones. Hizo una nueva actualización de Poemas y publicó en el diario La Nación el poema Límites. Bajo su dirección se inició la segunda época de la revista La Biblioteca y, en colaboración con Bioy Casares, editó la antología Libro del cielo y del infierno. Sus obras continuaron traduciéndose a varios idiomas:27 en este período en particular Otras inquisiciones fue traducido al francés bajo el título Enquétes, El Aleph al alemán con el título Labyrinthe y una selección de cuentos de El Aleph y Ficciones al italiano como L'Aleph. En este período también aparecieron los volúmenes sexto a noveno de las Obras Completas. Para 1960 se vinculó con el Partido Conservador.6 23 Compartió con Samuel Beckett, en 1961, el Premio Internacional de Literatura (consistente en 10 mil dólares), otorgado por el Congreso Internacional de Editores en Formentor, Mallorca. Este importante galardón lo promovió internacionalmente y le ofreció la posibilidad de que sus obras fueran traducidas a numerosos idiomas (inglés, francés, alemán, sueco, noruego, danés, italiano, polaco, portugués, hebreo, farsí, griego, eslovaco y árabe, entre otros). Apareció su Antología personal, editada por Sur. Viajó junto a su madre a Estados Unidos, invitado por la Universidad de Texas y por la Fundación Tinker, de Austin. Allí dictó conferencias y cursos sobre literatura argentina durante seis meses. En Nueva York se editó una antología de sus cuentos titulada Labyrinths y se tradujo al alemán Historia universal de la infamia. En 1962 se estrenó el film Hombre de la esquina rosada, basado en el cuento homónimo, que dirigió René Mugica. Finalizó una biografía sobre el poeta Almafuerte. En compañía de su madre, viajó a Europa en 1963 y ofreció numerosas conferencias. De regreso a Buenos Aires terminó una antología sobre Evaristo Carriego.28
Con la colaboración de María Esther Vázquez publicó Introducción a la literatura inglesa en 1965 y Literaturas germánicas medievales en 1966. Al año siguiente se editó Introducción a la literatura norteamericana, escrito en colaboración con Esther Zemborain y Crónicas de Bustos Domecq, con Bioy Casares. Se editaron, además, sus milongas y tangos en el libro Para las seis cuerdas, ilustrado por Héctor Basaldúa, y su cuento La intrusa.6 28
El 21 de septiembre de 1967 Borges, de 68 años, se casó por iglesia con Elsa Astete Millán, viuda de 57 años. Durante los primeros tiempos, la pareja vivió en la casa de él, compartiendo sus días con Leonor Acevedo. En el recuerdo de Elsa la madre del escritor no intervino para perjudicar la relación. No obstante, según los amigos de Borges, los celos de Doña Leonor eran terribles. Unos meses después del casamiento, la pareja se mudó a un departamento, donde hicieron por primera vez la experiencia de vivir juntos y solos, y allí la rivalidad entre su esposa y su madre cobró mayor virulencia y el escritor tuvo que empezar a visitar a escondidas a Leonor. Esa experiencia, además, llevaría a la pareja a enfrentar definitivamente la realidad: la convivencia era intolerable. En una entrevista publicada en 1993, Elsa admitió que no fue feliz junto a Borges: «Era introvertido, callado y poco cariñoso. Era etéreo, impredecible. No vivía en un mundo real».29 El matrimonio duró hasta octubre de 1970.
En 1968, con la colaboración de Margarita Guerrero, publicó una ampliación del Manual de zoología fantástica bajo el título El libro de los seres imaginarios. Apareció en ese año su Nueva antología personal. Viajó a Santiago de Chile para asistir al Congreso de Intelectuales Antirracistas y a Europa e Israel para pronunciar algunas conferencias. El director Hugo Santiago dirigió la película Invasión, con argumento de Bioy y Borges. En 1969 ordenó y corrigió dos libros de poemas: El otro, el mismo y Elogio de la sombra, el cual logró dos ediciones dentro del año. Con ilustraciones del pintor Antonio Berni, se editó su traducción y antología de Hojas de hierba, de Walt Whitman. Después de algunos años sin publicar cuentos, reunió varias narraciones en El informe de Brodie, libro publicado en agosto de 1970.6 28
En 1971 Borges publicó en Buenos Aires el cuento largo titulado El congreso. Al año siguiente viajó a Estados Unidos, donde recibió numerosas distinciones y pronunció conferencias en diversas universidades. A su regreso a Buenos Aires publicó el libro de poemas El oro de los tigres y el 24 de agosto, día de su cumpleaños, recibió un homenaje singular: la publicación en forma privada de su cuento El otro. En 1973 fue declarado Ciudadano Ilustre de la Ciudad de Buenos Aires y, paralelamente, solicitó su jubilación como director de la biblioteca nacional. En 1973 reunió por primera vez en un volumen sus Obras Completas, editadas por Emecé.
Como De Quincey y tantos otros, he sabido, antes de haber escrito una sola línea, que mi destino sería literario. Mi primer libro data de 1923; mis Obras Completas, ahora, reúnen la labor de medio siglo. No sé que mérito tendrán, pero me place comprobar la variedad de temas que abarcan. La patria, los azares de los mayores, las literaturas que honran las lenguas de los hombres, las filosofías que he tratado de penetrar, los atardeceres, los ocios, las desgarradas orillas de mi ciudad, mi extraña vida cuya posible justificación está en estas páginas, los sueños olvidados y recuperados, el tiempo....La prosa convive con el verso; acaso para la imaginación ambas son iguales. Jorge Luis Borges. Obras Completas. Prólogo.30
En Milán, Franco Maria Ricci publicó el cuento El congreso en una edición lujosísima con letras de oro. El libro de poesía La rosa profunda y la colección de relatos El libro de arena se publicaron en 1975, junto con la recopilación Prólogos. Se estrenó además la película El muerto, sobre un cuento homónimo, dirigida por Héctor Olivera.
Ante una nueva victoria del peronismo, Borges insistió en recordar al primer gobierno de Perón como "los años de oprobio". En 1975 falleció su madre, a los noventa y nueve años. A partir de ese momento Borges realizaría sus viajes junto a una ex-alumna, luego secretaria y —por último, en la senectud de Borges— su segunda esposa, María Kodama.
En 1986 fijó su residencia en Ginebra, ciudad a la que lo unía un profundo amor y a la cual Borges había designado una de mis patrias. El 26 de abril se casó —por poderes— con María Kodama, según Acta de esa fecha labrada en Colonia Rojas Silva, Paraguay. Murió el 14 de junio de 1986 víctima de un cáncer hepático. Obedeciendo su última voluntad, sus restos yacen en el cementerio de Plain Palais [c].31 32 La lápida,33 realizada por el escultor argentino Eduardo Longato, es de una piedra blanca y áspera. En lo alto de su cara anterior se lee Jorge Luis Borges y, debajo, «And ne forhtedon na», junto a un grabado circular con siete guerreros, una pequeña Cruz de Gales y los años "1899/1986" 34 La inscripción «And ne forhtedon na», formulada en anglosajón, se traduce como «Y que no temieran» [d]. La cara posterior de la lápida contiene la frase Hann tekr sverthit Gram okk / legger i methal theira bert, que se corresponde con dos versos del capítulo veintisiete de la Saga Volsunga (saga noruega del siglo XIII), y se traducen como «El tomó su espada, Gram, y colocó el metal desnudo entre los dos» [e]. Estos dos mismos versos los utilizó también Borges como epígrafe de su cuento Ulrica, incluido en El libro de arena, único relato de amor del autor y cuyo protagonista se llama Javier Otárola. Bajo esta segunda inscripción aparece el grabado de una nave vikinga, y bajo ésta una tercera inscripción: «De Ulrica a Javier Otárola», lo que permite interpretar esta última inscripción como una dedicatoria de María Kodama a Jorge Luis Borges.31 35
En febrero de 2009,36 se presentó un proyecto para trasladar sus restos al cementerio porteño de la Recoleta. Se generó una importante polémica,37 su viuda María Kodama se opuso rotundamente y finalmente el proyecto quedó desechado.
Bibliografía
• Historia universal de la infamia (1935)
El espantoso redentor Lazarus Morell.
El impostor inverosímil Tom Castro.
La viuda Ching, pirata puntual.
El proveedor de iniquidades Monk Eastman.
El asesino desinteresado Bill Harrigan.
El incivil maestro de ceremonias Kotsuké no Suké.
El tintorero enmascarado Hákim de Merv.
Hombre de la esquina rosada.
Un teólogo en la muerte.
La cámara de las estatuas.
Del Libro de las 1001 Noches, noche 272.
Historia de los dos que soñaron.
Del Libro de las 1001 Noches, noche 351.
El brujo postergado.
El espejo de tinta.
• Ficciones (1944), el cual consta de dos secciones y las siguientes narraciones:
I. El jardín de senderos que se bifurcan
Prólogo
Tlön, Uqbar, Orbis Tertius
El acercamiento a Almotásim
Pierre Menard, autor del Quijote
Las ruinas circulares
La lotería en Babilonia
Examen de la obra de Herbert Quain
La Biblioteca de Babel
El jardín de senderos que se bifurcan
II. Artificios
Prólogo
Funes el memorioso
La forma de la espada
Tema del traidor y del héroe
La muerte y la brújula
El milagro secreto
Tres versiones de Judas
El fin
La secta del Fénix
El Sur
• El Aleph (1949), consta de 17 cuentos:
El inmortal.
El muerto.
Los teólogos.
Historia del guerrero y la cautiva.
Biografía de Tadeo Isidoro Cruz (1829-1874).
Emma Zunz,
La casa de Asterión
La otra muerte.
Deutsches Requiem.
La busca de Averroes.
El Zahir
La escritura del Dios.
Abenjacán el Bojarí, muerto en su laberinto.
Los dos reyes y los dos laberintos.
La espera.
El hombre en el umbral.
El Aleph.
• La muerte y la brújula (1951)
Hombre de la esquina rosada.
Emma Zunz.
La espera.
Funes el memorioso.
La forma de la espada.
Tema del traidor y del héroe.
El jardín de senderos que se bifurcan.
El milagro secreto.
La muerte y la brújula.
• El informe de Brodie (1970)
La intrusa.
El indigno.
Historia de Rosendo Juárez.
El encuentro.
Juan Muraña.
La señora mayor.
El duelo.
El otro duelo.
Guayaquil.
El evangelio según Marcos.
El informe de Brodie.
• El libro de arena (1975).
El otro.
Ulrica.
El Congreso.
There are more things.
La Secta de los Treinta.
La noche de los dones.
El espejo y la máscara.
Undr.
Utopía de un hombre que está cansado.
El soborno.
Avelino Arredondo.
El disco.
El libro de arena.
Epílogo.
• La memoria de Shakespeare (1983)
Veinticinco de agosto de 1983.
Tigres azules.
La rosa de Paracelso.
La memoria de Shakespeare.
Ensayos
• Inquisiciones (1925)
• El tamaño de mi esperanza (1926)
• El idioma de los argentinos (1928)
• Evaristo Carriego (1930)
• Discusión (1932)
• Historia de la eternidad (1936)
• Otras inquisiciones (1952).
• Siete Noches (1980)
• Nueve ensayos dantescos (1982)
• Atlas (1985)
Poesías
• Fervor de Buenos Aires (1923)
• Luna de enfrente (1925)
• Cuaderno San Martín (1929)
• El hacedor (1960)
• El otro, el mismo (1964)
• Para las seis cuerdas (1965)
• Elogio de la sombra (1969)
• El oro de los tigres (1972)
• La Rosa Profunda (1975)
• La moneda de hierro (1976)
• Historia de la Noche (1977)
• Adrogué (1977)
• La Cifra (1981)
• Los Conjurados (1985)
Antologías
• Antología personal (1961)
• Nueva antología personal (1968).
• Libro de sueños (1976)
• Textos cautivos (1986).
• Borges en el hogar (2000).
Obras en colaboración
• Índice de la poesía americana (16), antología con Vicente Huidobro y Alberto Hidalgo
• Antología clásica de la literatura argentina (1937), con Pedro Henríquez Ureña
• Antología de la literatura fantástica (1940), con Bioy Casares y Silvina Ocampo
• Antología poética argentina (1941), con Bioy Casares y Silvina Ocampo
• Seis problemas para don Isidro Parodi (1942), con Bioy Casares
• El compadrito (1945), antología de textos de autores argentinos en colaboración con Silvina Bullrich
• Dos fantasías memorables (1946), con Bioy Casares
• Un modelo para la muerte (1946), con Bioy Casares
• Obras escogidas (1948).
• Antiguas literaturas germánicas (México, 1951), con Delia Ingenieros
• El idioma de Buenos Aires (1952), con José Edmundo Clemente
• Obras completas (1953)
• El Martín Fierro (1953), con Margarita Guerrero
• Poesía gauchesca (1955), con Bioy Casares
• Cuentos breves y extraordinarios (1955), con Bioy casares
• El paraíso de los creyentes (1955), con Bioy casares
• Leopoldo Lugones (1955), con Betina Edelberg
• Los orilleros (1955), con Bioy Casares
• La hermana Eloísa (1955), con Luisa Mercedes Levinson
• Manual de zoología fantástica (México, 1957), con Margarita Guerrero
• Los mejores cuentos policiales (1943 y 1956), con Bioy Casares
• Libro del cielo y del infierno (1960), con Bioy Casares
• Introducción a la literatura inglesa (1965), con María Esther Váquez
• Literaturas germánicas medievales (1966), con María Esther Vázquez, revisa y corrige el tratado Antiguas literaturas germánicas
• Introducción a la literatura norteamericana (1967), con Estela Zemborain de Torres
• Crónicas de Bustos Domecq (1967), con Bioy Casares.
• El libro de los seres imaginarios (1967), escrito en colaboración con Margarita Guerrero.
• Nueva antología personal (1968).
• Prólogos (1975).
• ¿Qué es el budismo? (1976), con Alicia Jurado
• Diálogos (1976), con Ernesto Sabato
• Nuevos cuentos de Bustos Domecq (1977), con Bioy Casares
• Breve antología anglosajona (1978), con María Kodama
• Obras completas en colaboración (1979)
• Atlas (1985), con María Kodama
• Textos cautivos (1986), textos publicados en la revista El hogar
Guiones de cine
• Los orilleros (1939). Escrito en colaboración con Adolfo Bioy Casares
• El paraíso de los creyentes (1940). Escrito en colaboración con Adolfo Bioy Casares
• Invasión (1969). Escrito en colaboración con Adolfo Bioy Casares y Hugo Santiago.
• Les autres (1972). Escrito en colaboración con Hugo Santiago
Fragmento de su primera novela "Himno al mar"
Oh mar! oh mito! oh largo lecho!
Y sé por qué te amo. Sé que somos muy viejos.
Que ambos nos conocemos desde siglos.
Sé que en tus aguas venerandas y rientes ardió la aurora de la Vida.
(En la ceniza de una tarde terciaria vibré por primera vez en tu seno).
Oh proteico, yo he salido de ti.
¡Ambos encadenados y nómadas;
Ambos con un sed intensa de estrellas;
Ambos con esperanzas y desengaños;
Ambos, aire, luz, fuerza, oscuridades;
Ambos con nuestro vasto deseo y ambos con nuestra grande miseria.11
José Emilio Pachecos
De gran humanidad, simpatía y modestia, junto con una portentosa erudición, fue reconocido como hombre de letras desde muy joven. En la década de los cincuenta ya figuraba en antologías al lado de los grandes poetas latinoamericanos. Estudió en La Universidad Nacional Autónoma de México, donde inició sus actividades literarias en la revista Medio Siglo; tradujo del inglés y publicó libros de lírica y narrativa; también trabajó dirigiendo y editando colecciones bibliográficas y diversas publicaciones y suplementos culturales. Al lado de Carlos Monsiváis, compartió la dirección del suplemento de la revista Estaciones; fue secretario de redacción de la Revista de la Universidad de México y de México en la Cultura, suplemento de Novedades, y fue jefe de redacción de La Cultura en México, suplemento de Siempre!. Dirigió la colección Biblioteca del Estudiante Universitario publicada por la UNAM, que reúne obras literarias desde el pasado prehispánico al México contemporáneo. Es especialista en Literatura Mexicana del siglo XIX, así como profundo conocedor de la obra de Jorge Luis Borges, en cuyo honor dictó una serie de conferencias en 1999. Fue investigador del Centro de Estudios Históricos del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) desde hace décadas y ha sido profesor en la Universidad Nacional Autónoma de México, en la Universidad de Maryland (College Park), en la Universidad de Essex y en algunas otras de Estados Unidos, Canadá, y Reino Unido.
Entre otros galardones ha recibido el Premio Cervantes (2009); el Premio Reina Sofía de Poesía Iberoamericana (2009); el José Donoso (2001); el Octavio Paz (2003); el Pablo Neruda (2004); el Ramón López Velarde (2003); el Alfonso Reyes (2004); el José Asunción Silva (1996); el Xavier Villaurrutia (1973); y el García Lorca (2005).
En la actualidad José Emilio Pacheco es una figura central de la literatura mexicana y miembro del El Colegio Nacional desde 1986; ingresó en éste con la lectura de su ensayo A ciento cincuenta años de la Academia de Letrán.1 Desde 1994 es creador emérito del Sistema Nacional de Creadores Artísticos (SNCA). Fue nombrado miembro honorario de la Academia Mexicana de la Lengua en mayo de 2006.2
Su estilo es conversacional y coloquial, claro y antirretórico; su gran tema es el tiempo: cada poema suyo analiza imaginativamente un elemento que forma la corriente de lo cotidiano; asumiendo valores humanos éticos y sociales, otras veces reflexiona sobre el propio papel de la poesía. Como afirma Carlos Monsiváis, en su obra domina
La pasión por la metáfora, la concentración en unas cuantas líneas de un relato casi siempre pesaroso, el gusto por los relatos inesperados, el despliegue del poder de síntesis, el ejercicio múltiple de la metáfora, el juego de analogías como espejos de la devastación, la alabanza jubilosa del paisaje. En poesía, ajusta sus dones melancólicos, su pesimismo que es resistencia al autoengaño, su fijación del sitio de la crueldad en el mundo, su poderío aforístico.3
La mayoría de sus títulos poéticos están recogidos en el libro Tarde o temprano (Poemas 1958 - 2000) (México: FCE, 2000), que reúne sus primeros seis libros de poemas: Los elementos de la noche, El reposo del fuego, No me preguntes cómo pasa el tiempo, Irás y no volverás, Islas a la deriva, Desde entonces, a los que han seguido Los trabajos del mar, Miro la tierra, Ciudad de la memoria y un volumen de versiones poéticas: Aproximaciones. Es autor de dos novelas, Morirás lejos y Las batallas en el desierto, y de tres libros de cuentos: La sangre de Medusa, El viento distante y El principio del placer. Es notoria su labor literaria, periodística, historiográfica y política. Junto al célebre ensayista Carlos Monsiváis y el laureado con el Premio Nobel Octavio Paz creó la antología Ómnibus de Poesía Mexicana. Con su ensayo-discurso acerca de la literatura mexicana --"A 150 años de la Academia de Letrán"-- ingresó el 10 de julio de 1986 en el Colegio Nacional de México. Como traductor se le deben en especial versiones de Cuatro cuartetos, de T. S. Eliot, de Cómo es (Samuel Beckett), Un tranvía llamado deseo (Tennessee Williams), Vidas imaginarias (Marcel Schwob) y De profundis (Óscar Wilde). Ha editado la Antología del Modernismo y obras de autores como Federico Gamboa y Salvador Novo.
Su poema Alta traición es quizá el más célebre entre la juventud mexicana. En su obra narrativa transfigura el mundo infantil y adolescente en el escenario cada vez más ruinoso de la ciudad de México (El viento distante y otros relatos (1963), El principio del placer (1972), Las batallas en el desierto (1981)... En Morirás lejos (1967) trata sobre distintas épocas de persecución (nazismo, guerra romana contra los judíos).
El 21 de abril de 2010 deja una serie de objetos en la Caja de las Letras del Instituto Cervantes para que se abran 100 años después, en 2110. En el momento de depositarlo dijo:4
Lo dejo para que quien abra esto en cien años sepa quien fui, porque no creo que nadie recuerde mi obra
Premios y Reconocimientos
Ha obtenido los siguientes premios literarios - es decir los principales reconocimientos a su labor como poeta y ensayista:
• Premio Magda Donato por Morirás lejos -- 1967
• Premio Nacional de Poesía Aguascalientes por No me preguntes cómo pasa el tiempo--1969
• Premio Xavier Villaurrutia por El principio del placer -- 19735
• Premio Nacional de Periodismo de México por Divulgación Cultural -- 19806 7
• Premio Malcolm Lowry por trayectoría (Ensayo literario) -- 19918
• Premio Nacional de Lingüística y Literatura -- 19929
• Premio José Asunción Silva al mejor libro de poemas en español -- publicado entre 1990 y 1995
• Premio Iberoamericano de Letras José Donoso -- 2001
• Premio Internacional Octavio Paz de Poesía y Ensayo -- 2003
• Premio de Poesía Iberoamericana Ramón López Velarde -- 2003
• Premio Internacional Alfonso Reyes -- 2004
• Premio Iberoamericano de Poesía Pablo Neruda -- 2004
• Premio Internacional de Poesía Ciudad de Granada - Federico García Lorca -- 2005
• Premio Reina Sofía de Poesía Iberoamericana -- 7 de mayo de 2009
• La Medalla 1808 otorgada por el Gobierno del Distrito Federal -- 25 de junio de 200910
• La Medalla de Oro de Bellas Artes otorgada por la Secretaría de Educación Pública de México -- 28 de junio de 200911
• Premio Cervantes de las letras -- 200912
• Doctorado honoris causa por la Universidad Autónoma de Nuevo León -- 11 de septiembre de 2009
• Doctorado honoris causa por la Universidad Autónoma de Campeche -- 3 de marzo de 2010
• Doctorado honoris causa por la Universidad Nacional Autónoma de México -- 23 de septiembre de 2010
Bibliografía
Lírica
• Los elementos de la noche (1963)
• El reposo del fuego (1966)
• No me preguntes cómo pasa el tiempo (1970)
• Irás y no volverás (1973)
• Islas a la deriva (1976)
• Desde entonces (1979)
• Los trabajos del mar (1984)
• Miro la tierra (1987)
• Ciudad de la memoria (1990)
• El silencio de la luna (1996)
• La arena errante (1999)
• Siglo pasado (2000)
• Tarde o temprano (2000; poesía completa, ampliada en la edición de 2010)
• Como la lluvia (2009)
• La edad de las tinieblas (2009)
• Un tranvía llamado deseo traducción al español de la obra de Tennessee Williams,(2010)
Narrativa
• La sangre de Medusa y otros cuentos marginales (1959)
• El viento distante (1963)
• Morirás lejos (1967)
• El principio del placer (1972)
• Las batallas en el desierto (1981)
• Tarde de agosto (1992)
Otros
• 1987. Dirigida por Alberto Isaac y adaptada por Vicente Leñero, se presenta la película "Mariana, Mariana", adaptación de Las batallas en el desierto. Actúan Luis Mario y Gerardo Quiroz, Pedro Armendáriz Jr., Aarón Hernán, Saby Kamalich y Elizabeth Aguilar.
• 1992. Café Tacuba en su disco con el mismo nombre presenta la canción Las Batallas, basada en la historia del libro Batallas en el desierto.
• 1995. La Orquesta Sinfónica de Nuevo León, en su Temporada de Jóvenes Valores Estrena "El reposo del Fuego", Obra Sinfónica para Tenor y Orquesta Sinfónica, compuesta por el compositor regiomontano Gustavo A. Farías García, con poemas del libro homónimo de José Emilio Pacheco.
Predecesor:
Juan Marsé
Premio Miguel de Cervantes
2009
Sucesor:
-
Notas
1. ↑ El Colegio Nacional. «Miembros poesía y narrativa, José Emilio Pacheco». Consultado el 1 de diciembre de 2009.
2. ↑ «Académicos honorarios de la Academia Mexicana de la Lengua». Consultado el 13 de noviembre de 2009.
3. ↑ Carlos Monsiváis (1 de diciembre de 2009). «El poder de síntesis». El País. Consultado el 1 de diciembre de 2009.
4. ↑ Pacheco deja en la Caja de las Letras el legado de "una época oscura"
5. ↑ «Premio Xavier Villaurrutia». El poder de la palabra. Consultado el 7 de diciembre de 2009.
6. ↑ Periódico el Universal
7. ↑ Premio Nacional de Periodismo. «Historia 1975-2001». Consultado el 5 de marzo de 2010.
8. ↑ Coordinación Nacional de Lectura del INBA
9. ↑ Consejo Nacional para la Cultura y las Artes. «Premio Nacional de Ciencias y Artes». Secretaría de Educación Pública. Consultado el 1 de diciembre de 2009.
10. ↑ Periodico La Jornada
11. ↑ Boletín de la Secretaría de Educación Pública
12. ↑ «José Emilio Pacheco gana el Premio Cervantes». El Universal (30 de noviembre de 2009). Consultado el 2 de mayo de 2010.
Bibliografía
En español
• José Emilio Pacheco : perspectivas críticas / Hugo J Verani., 2006
• Ensoñación cósmica : poética de El reposo de fuego de José Emilio Pacheco / Betina Bahía Diwan., 2004
• Dilemas de la poesía de fin de siglo : José Emilio Pacheco y Jaime Saenz / Elizabeth Pérez., 2001
• José Emilio Pacheco : poeta y cuentista posmoderno / José de Jesús Ramos., 1992
• El papel del lector en la novela mexicana contemporánea: José Emilio Pacheco/ Magda Graniela-Rodríguez., 1991
• José Emilio Pacheco : poética y poesía del prosaísmo / Daniel Torres., 1990
• La hoguera y el viento : José Emilio Pacheco ante la crítica / Hugo J Verani., 1987
• José Emilio Pacheco / Luis Antonio de Villena., 1986
• Ficción e historia : la narrativa de José Emilio Pacheco / Yvette Jiménez de Báez., 1979
En inglés
• Modern Spanish American poets. Second series / María Antonia Salgado., 2004
• José Emilio Pacheco and the poets of the shadows / Ronald J Friis., 2001
• Out of the volcano : portraits of contemporary Mexican artists / Margaret Sayers Peden., 1991
• Tradition and renewal : essays on twentieth-century Latin American literature and culture / Merlin H Forster., 1975
• The turning tides : the poetry of José Emilio Pacheco / Mary Kathryn Docter., 1991
• Time in the poetry of José Emilio Pacheco : images, themes, poetics / Judith Roman Topletz., 1983
Fragmetos leídos:
"Demolición"
"Los desairados"
"Fisura"
Julio Cortázar
Cortázar nació en la embajada de Argentina en Bélgica, en Ixelles, distrito de Bruselas, el 26 de agosto de 1914, hijo de Julio José Cortázar y María Herminia Descotte. Más adelante en su vida declararía: «Mi nacimiento [en Bruselas] fue un producto del turismo y la diplomacia». En ese entonces Bruselas estaba ocupada por los alemanes.
Siempre se afirmó cierta relación de su padre con el cuerpo diplomático argentino. Sus padres, María Herminia Descotte y Julio José Cortázar, eran argentinos. Hacia fines de la Primera Guerra Mundial, los Cortázar lograron pasar a Suiza gracias a la condición alemana de la abuela materna de Julio, y de allí, poco tiempo más tarde a Barcelona, donde vivieron un año y medio. A los cuatro años volvieron a Argentina y pasó el resto de su infancia en Banfield, en el sur del Gran Buenos Aires, junto a su madre, una tía y Ofelia, su única hermana (un año menor que él). Vivió en una casa con fondo (Los Venenos, Deshoras, están basados en sus recuerdos infantiles), pero no fue totalmente feliz. «Mucha servidumbre, excesiva sensibilidad, una tristeza frecuente» (Carta a Graciela M. de Sola, París, 4 de noviembre de 1963). Conoció, gracias a su madre, al escritor a quien admiraría por el resto de su vida: Julio Verne.
«Pasé mi infancia en una bruma de duendes, de elfos, con un sentido del espacio y del tiempo diferente al de los demás» (revista Plural n°44, México 5/1975). Cortázar fue un niño enfermizo y pasó mucho tiempo en cama, por lo que la lectura fue su gran compañera. Su madre le seleccionaba lo que podía leer, convirtiéndose en la gran iniciadora de su camino de lector, primero, y de escritor después. Declaró: «Mi madre dice que empecé a escribir a los ocho años, con una novela que guarda celosamente a pesar de mis desesperadas tentativas por quemarla» (revista Siete Días, Buenos Aires, 12/1973). Cortázar también recuerda que en cierta ocasión un pariente suyo (un tío o algo así) descubrió una serie de poemas suyos y se los dio a su madre, diciéndole que evidentemente esos poemas no eran míos, que yo lo los copiaba, de alguna antología de poemas, por lo cual su madre llegó a preguntarle si esos poemas realmente eran suyos. 2 Leía tanto que algún médico llegó a recomendarle leer menos durante cinco o seis meses y salir más a tomar un poco de sol. Muchos de sus cuentos son autobiográficos, como Bestiario, Final del juego, Los venenos o La Señorita Cora, entre otros.
Juventud
Se forma como Maestro Normal en 1932 y Profesor Normal en Letras en 1935 en la Escuela Normal de Profesores Mariano Acosta, de aquellos años surgieron La Escuela de Noche (Deshoras). En aquella época, comenzó a frecuentar los estadios a ver boxeo, donde ideó una especie de filosofía del box «eliminando el aspecto sangriento y cruel que provoca tanto rechazo y cólera» (La fascinación de las palabras). Admiraba al hombre que siempre iba para adelante y a pura fuerza y coraje conseguía ganar (Torito, Final del juego).
Un día, en 1932, caminando por el centro de Buenos Aires, se topó con un libro de Jean Cocteau, un total desconocido para él hasta aquel momento, titulado Opio, Diario de una desintoxicación. Aquella lectura lo marcaría para el resto de su vida: «Sentí que toda una etapa de vida literaria estaba irrevocablemente en el pasado… desde ese día leí y escribí de manera diferente, ya con otras ambiciones, con otras visiones» (La fascinación de las palabras, 1997).
Comenzó en la Universidad de Buenos Aires sus estudios de Filosofía, aprobó el primer año, pero comprendió que debía utilizar el título que ya tenía para trabajar y ayudar a su madre. Dictó clases en Bolívar, Saladillo (Ciudad en cual figura en su Libreta Cívica como oficina de enrolamiento); y luego en Chivilcoy. Vivió en cuartos solitarios de pensiones aprovechando todo el tiempo libre para leer y escribir (Distante espejo). En 1944 se traslada a Cuyo, Mendoza, y en su Universidad imparte cursos de Literatura Francesa. Publica su primer cuento, Bruja, en la revista Correo Literario. Participa en manifestaciones de oposición al peronismo. En 1945, cuando Juan Domingo Perón gana las elecciones presidenciales presenta su renuncia. "Preferí renunciar a mis cátedras antes de verme obligado a 'sacarme el saco' como les pasó a tantos colegas que optaron por seguir en sus puestos." Reúne un primer volumen de cuentos, La otra orilla. Regresa a Buenos Aires, donde comienza a trabajar en la Cámara Argentina del Libro. En 1946 publica el cuento "Casa tomada" en la revista Los Anales de Buenos Aires, dirigida por Jorge Luis Borges. Ese mismo año publica un trabajo sobre el poeta inglés John Keats, "La urna griega" en la poesía de John Keats en la Revista de Estudios Clásicos de la Universidad de Cuyo. En 1947 colabora en varias revistas, entre ellas en Realidad. Publica un importante trabajo teórico, "Teoría del Túnel", y en la revista Los Anales de Buenos Aires aparece publicado su cuento Bestiario. En 1948 obtiene el título de traductor público de inglés y francés, tras cursar en apenas nueve meses estudios que normalmente insumen tres años. El esfuerzo le provoca síntomas neuróticos, uno de los cuales (la búsqueda de cucarachas en la comida) desaparece con la escritura de un cuento, "Circe", que junto con Casa Tomada y Bestiario (aparecidos en Los anales de Buenos Aires) será incluido más adelante en Bestiario. En 1949 publica el poema dramático Los Reyes, primera obra firmada con su nombre real e ignorado por la crítica. Durante el verano escribe una primera novela, "Divertimento", que de alguna manera prefigura Rayuela. Divertimento será publicada sólo en 1986, después de su muerte. Colabora en revistas culturales de Buenos Aires (Cabalgata, Realidad y Sur) En 1950 escribe otra novela, El examen, rechazada por el asesor literario de la Editorial Losada, Guillermo de Torre. Cortázar la presentará a un concurso convocado por la misma editorial, sin éxito. Esta novela también será editada tras la muerte del escritor, en 1986. En 1951 publicó Bestiario, una colección de ocho relatos que le valieron cierto reconocimiento en el ambiente local. Poco después, disconforme con el gobierno de Juan Domingo Perón, decide trasladarse a París, ciudad donde, salvo esporádicos viajes por Europa y América Latina, residiría durante el resto de su vida.
Matrimonio
Se casó con Aurora Bernárdez en 1953, una traductora argentina. Vivían en París con condiciones económicas bajas y le surgió el ofrecimiento de traducir la obra completa, en prosa, de Edgar Allan Poe para la Universidad de Puerto Rico. Dicho trabajo sería considerado luego por los críticos como la mejor traducción de la obra del escritor estadounidense. Juntos se fueron a vivir a Italia durante el año que duró el trabajo, luego viajaron a Buenos Aires en barco y Cortázar se pasó el trayecto escribiendo en su máquina portátil una nueva novela. «La revolución cubana… me mostró de una manera cruel y que me dolió mucho el gran vacío político que había en mí, mi inutilidad política… los temas políticos se fueron metiendo en mi literatura...» (La fascinación de las palabras). En 1963 visitó Cuba invitado por Casa de las Américas para ser jurado en un concurso. Ya nunca dejaría de interesarse por la política latinoamericana. En ese mismo año aparece lo que sería su mayor éxito editorial y le valdría el reconocimiento de ser parte del boom latinoamericano: Rayuela, la que se convirtió en un clásico de la literatura argentina. Según declaró en una carta a Manuel Antín en agosto de 1964, ese no iba a ser el nombre de su novela sino Mandala: «De golpe comprendí que no hay derecho a exigirle a los lectores que conozcan el esoterismo búdico o tibetano»; pero no estaba arrepentido por el cambio.
En 1967, rompe su vínculo con Bernárdez y toma por pareja a la lituana Ugné Karvelis, con quien nunca contrajo matrimonio, pero quien le inculcó un gran interés por la política.
Con su tercera pareja y segunda esposa, la escritora canadiense Carol Dunlop, realizó numerosos viajes, uno de los primeros fue a Polonia, donde participó de un congreso de solidaridad con Chile. Otro de los viajes que hizo junto a Carol Dunlop fue plasmado en el libro Los autonautas de la cosmopista que cuenta el trayecto de la pareja por la autopista París-Marsella. Tras la muerte de Carol Dunlop, la última esposa de Cortázar, Aurora Bernárdez lo acompañaría durante su enfermedad. Actualmente ella es la única heredera de su obra publicada y de sus textos.
Cortázar social
Los derechos de autor de varias de sus obras fueron donados para ayudar a los presos políticos de varios países, entre ellos Argentina. En una carta a su amigo Francisco Porrúa de febrero de 1967, confesó: «El amor de Cuba por el Che me hizo sentir extrañamente argentino el 2 de enero, cuando el saludo de Fidel en la plaza de la Revolución al comandante Guevara, allí donde esté, desató en 300.000 hombres una ovación que duró diez minutos».
En noviembre de 1970 viajó a Chile, donde se solidarizó con el gobierno de Salvador Allende y pasó unos días para visitar a su madre y amigos, «y ahí el delirio fue una especie de pesadilla diurna» contó en una carta a Gregory Rabassa.
En 1971 fue «excomulgado»[cita requerida] por Fidel Castro, junto a otros escritores, por pedir información sobre el arresto del poeta Heberto Padilla. A pesar de su desilusión con la actitud de Castro, siguió de cerca la situación política de Latinoamérica. En 1973, fue galadornado con el Premio Médicis por su Libro de Manuel y destinó sus derechos a la ayuda de los presos políticos en Argentina. En 1974, fue miembro del Tribunal Bertrand Russell II reunido en Roma para examinar la situación política en América Latina, en particular las violaciones de los Derechos Humanos.
Su obra poética
A pesar de ser reconocido por su narrativa, escribió gran cantidad de poemas en prosa (en libros mixtos como Historias de cronopios y de famas, Un tal Lucas, Último round); e incluso poemas en verso (Presencia, Pameos y meopas, Salvo el crepúsculo). Colaboró en muchas publicaciones en distintos países, grabó sus poemas y cuentos, escribió letras de tangos (por ejemplo con el Tata Cedrón) y le puso textos a libros de fotografías e historietas.
Nicaragua
En 1976, viaja a Costa Rica donde se encuentra con Sergio Ramírez y Ernesto Cardenal y emprende un viaje clandestino y plagado de peripecias hacia la localidad de Solentiname en Nicaragua. Este viaje lo marcará para siempre y será el comienzo de una serie de visitas a este país.
Justamente luego del triunfo de la revolución sandinista viaja reiteradas veces a dicho país y conoce de cerca el proceso y la realidad nicaragüense y latinoamericana. Estas experiencias darán como resultado una serie de textos que serán recopilados en el libro Nicaragua, tan violentamente dulce.
Archivo:Julio Cortázar.JPG
Tumba de Cortázar en Montparnase, París. Sobre la lápida se yergue la imagen de un cronopio, personaje creado por el escritor
Enfermedad y muerte
En agosto de 1981 sufrió una hemorragia gástrica y salvó su vida de milagro. Nunca dejó de escribir, fue su pasión aún en los momentos más difíciles. En 1983, vuelta la democracia en Argentina, Cortázar hace un último viaje a su patria, donde es recibido cálidamente por sus admiradores, que lo paran en la calle y le piden autógrafos, en contraste con la indiferencia de las autoridades nacionales. Después de visitar a varios amigos, regresa a París. Poco después François Mitterrand le otorga la nacionalidad francesa.
Carol Dunlop había fallecido el 2 de noviembre de 1982, sumiendo a Cortázar en una profunda depresión. Julio murió el 12 de febrero de 1984 a causa de una leucemia. Dos días después, fue enterrado en el cementerio de Montparnasse, en la misma tumba donde yacía Carol. La lápida y la escultura que adornan la tumba fueron hechas por sus amigos, los artistas Julio Silva y Luis Tomasello [1]. Es costumbre dejar una copa o un vaso de vino y una hoja de papel o un billete de metro con una rayuela dibujada.
Reconocimiento
• En Buenos Aires, la pequeña plaza situada en la intersección de las calles Serrano y Honduras lleva su nombre.
• La escuela secundaria básica n.º 13 se llama «Julio Cortázar» en su honor.
• En 1984 la Fundación Konex le otorga a su figura fallecida el Premio Konex de Honor por su gran aporte a la historia de la literatura argentina.
• La Universidad de Guadalajara, inauguró, el 12 de octubre de 1994, la Cátedra Latinoamericana Julio Cortázar, en honor al escritor. Dicha inauguración contó con la presencia del escritor mexicano Carlos Fuentes, del colombiano Gabriel García Márquez y de la viuda de Cortázar, Aurora Bernárdez. Esta cátedra rinde homenaje a la memoria, la persona, la obra y las preocupaciones intelectuales que rigieron la vida del argentino.
• La escuela del partido de Ituzaingó (en la zona oeste del Gran Buenos Aires y en Capital Federal, el colegio secundario Nº 1 D.E 12, situado en Flores. En la ciudad de Florencio Varela, al sur del Gran Buenos Aires, existe la Escuela de Educación Media Nro 8 Julio Cortázar.
• En 2007 el alcalde socialista de París, Bertrand Delanoë dio oficialmente el nombre de Place Julio Cortázar a la pequeña plazoleta en el extremo occidental de la Île Saint-Louis donde transcurre el relato Las Babas del Diablo.
«Yo creo que desde muy pequeño mi desdicha y mi dicha, al mismo tiempo, fue el no aceptar las cosas como me eran dadas. A mí no me bastaba con que me dijeran que eso era una mesa, o que la palabra madre era la palabra madre y ahí se acaba todo. Al contrario, en el objeto mesa y en la palabra madre empezaba para mí un itinerario misterioso que a veces llegaba a franquear y en el que a veces me estrellaba. En suma, desde pequeño, mi relación con las palabras, con la escritura, no se diferencia de mi relación con el mundo en general. Yo parezco haber nacido para no aceptar las cosas tal como me son dadas.»
Julio Cortázar.
Bibliografía
Cuentos y misceláneas
• La otra orilla, 1945
• Bestiario, 1951 (cuentos)
• Final del juego, 1956 (cuentos)
• Las armas secretas, 1959 (cuentos)
• Historias de cronopios y de famas, 1962 (misceláneas)
• Carta a una señorita en París , 1963
• Todos los fuegos el fuego, 1966 (cuentos)
• La vuelta al día en ochenta mundos, 1967 (misceláneas)
• El perseguidor y otros cuentos, 1967 (cuentos)
• La isla a mediodía y otros relatos, 1971
• Octaedro, 1974 (cuentos)
• Alguien que anda por ahí, 1977 (cuentos)
• Un tal Lucas, 1979 (cuentos)
• Territorios, 1979 (cuentos)
• Queremos tanto a Glenda, 1980 (cuentos)
• Deshoras, 1982 (cuentos)
• El perseguidor, 2009 (cuento ilustrado, Libros del Zorro Rojo)
• La noche boca arriba, (cuento)
Novelas
• Los premios, 1960
• Rayuela, 1963
• 62/modelo para armar, 1968
• Libro de Manuel, 1973
• El examen, 1986 (escrita en 1950)
• Divertimento, 1986 (escrita en 1960)
• Diario de Andrés Fava, 1995 (obra póstuma)
Teatro
• Los reyes, 1949 (con el seudónimo de Julio Denis)
• Adiós Robinson y otras piezas breves, 1995 (obra póstuma)
Poesía
• Presencia, 1938 (sonetos, con el seudónimo de Julio Denis)
• Pameos y meopas, 1971
• Salvo el crepúsculo, 1984
Otros
• La autopista del Sur, 1964
• Buenos Aires, Buenos Aires, 1967
• Último round, 1969
• Viaje alrededor de una mesa, 1970
• Prosa del observatorio, 1972
• La casilla de los Morelli, 1973
• Fantomas contra los vampiros multinacionales, cómic, 1975
• Estrictamente no profesional, 1976
• Los autonautas de la cosmopista, 1982 (con Carol Dunlop)
• Nicaragua tan violentamente dulce, 1983.
• Silvalandia (basado en ilustraciones de Julio Silva), 1984
• Imagen de John Keats (obra póstuma, escrita entre 1951 y 1952)
• Correspondencia Cortázar-Dunlop-Monrós, Alpha Decay, Barcelona, 2009 (obra póstuma)
• Papeles inesperados, Alfaguara, 2009 (obra póstuma)
• Cartas a los Jonquières, Alfaguara, 2010 (obra póstuma)
Audio libros
• Cortázar lee a Cortázar, 1966
• Voz de América Latina, 1968
• Cortázar por él mismo, un libro sonoro, 1970
• Casa de las Américas, 1978
Filmografía
• Cortázar, 1994. Documental dirigido por Tristán Bauer.
• Cortázar, apuntes para un documental, 2002. Documental dirigido por Eduardo Montes-Bradley.
• Graffiti, 2005. Cortometraje basado en el relato corto Graffiti. Dirigido por Pako González. Primera parte, segunda parte
• Blow-Up, 1966. Dirigida por Michelangelo Antonioni, con David Hemmings, Vanessa Redgrave, Sarah Miles, Peter Bowles y Veruschka von Lehndorff. Basada en el texto Las babas del diablo. Cortázar aparece como cameo en una de las fotografías mostradas en la película.
• Mentiras piadosas, 2008. Dirigida por Diego Sabanés. Versión libre del texto La salud de los enfermos. Tráiler
Fragmento leído: "Manual de instrucciones" "Instrucciones para subir una escalera" "Instrucciones para cantar"
"Instrucciones para dar cuerda a un reloj"
Piensa en esto: cuando te regalan un reloj te regalan un pequeño infierno florido, una cadena de rosas, un calabozo de aire. No te dan solamente el reloj, que los cumplas muy felices y esperamos que te dure porque es de buena marca, suizo con áncora de rubíes; no te regalan solamente ese menudo picapedrero que te atarás a la muñeca y pasearás contigo. Te regalan —no lo saben, lo terrible es que no lo saben—, te regalan un nuevo pedazo frágil y precario de ti mismo, algo que es tuyo pero no es tu cuerpo, que hay que atar a tu cuerpo con su correa como un bracito desesperado colgándose de tu muñeca. Te regalan la necesidad de darle cuerda todos los días, la obligación de darle cuerda para que siga siendo un reloj; te regalan la obsesión de atender a la hora exacta en las vitrinas de las joyerías, en el anuncio por la radio, en el servicio telefónico. Te regalan el miedo de perderlo, de que te lo roben, de que se te caiga al suelo y se rompa. Te regalan su marca, y la seguridad de que es una marca mejor que las otras, te regalan la tendencia de comparar tu reloj con los demás relojes. No te regalan un reloj, tú eres el regalado, a ti te ofrecen para el cumpleaños del reloj.
Instrucciones para dar cuerda al reloj
Allá al fondo está la muerte, pero no tenga miedo. Sujete el reloj con una mano, tome con dos dedos la llave de la cuerda, remóntela suavemente. Ahora se abre otro plazo, los árboles despliegan sus hojas, las barcas corren regatas, el tiempo como un abanico se va llenando de sí mismo y de él brotan el aire, las brisas de la tierra, la sombra de una mujer, el perfume del pan.
¿Qué más quiere, qué más quiere? Átelo pronto a su muñeca, déjelo latir en libertad, imítelo anhelante. El miedo herrumbra las áncoras, cada cosa que pudo alcanzarse y fue olvidada va corroyendo las venas del reloj, gangrenando la fría sangre de sus rubíes. Y allá en el fondo está la muerte si no corremos y llegamos antes y comprendemos que ya no importa.
Autoevaluación de la clase
En el día de hoy realizamos un ejercicio sobre la última lectura del autor Julio Cortázar Manual de instrucciones, el cual consistía en realizar unas instrucciones para algún oficio inútil o que nadie quisiera hacer, éste es el mio la verdad no es muy creativo pero lo intenté:
Manual para dejarse robar
Primero salga a la calle preferiblemente con dinero o todos los artículos de valor para que no lo chucen, lo rayen o como se dice comummente no lo maten.
Transite por lugares seguros de robo como el Parque Berrío, el puente colombia, pasaje la veracruz o los buses Transmedellín, lo fundamental es demostrar el miedo, si tiene bolso camine observando repetidamente el entorno para que noten sus nervios, cuando se le acerque el profesional en robo grite constantemente,pidale que le deje los pasajes para el bus o la sim del celular, luche y rindase porque sabe que de todos modos la atracaran, luego cuentele a todos sus familiares y finalmente espere a que le apaguen el celular o le llegue plata para que reponga lo que le quitaron.
La clase me pareció súper pues realizamos éste ejercicio que es divertido y poco inusual, lo que hace que se rompa la linealidad que se ha mantenido durante la materia, me parecio importante practicarlo pues de ésto podemos aprender cómo el escribir cosas idiotas nos puede servir a mejorar el proceso de escritura, además nos podemos liberar de muchas cosas que tenemos en la mente y hacer por que no algo divertido, con sentido y apto para leer.
Cibergrafía
http://www.wikipedia.com
http://www.sololiteratura.com/cor/manualdeinstrucciones.html
(Buenos Aires, 24 de agosto de 1899 – Ginebra, 14 de junio de 1986) fue un escritor argentino, uno de los autores más destacados de la literatura del siglo XX. Publicó ensayos breves, cuentos y poemas. Su obra, fundamental en la literatura y en el pensamiento humano, ha sido objeto de minuciosos análisis y de múltiples interpretaciones, trasciende cualquier clasificación y excluye cualquier tipo de dogmatismo.1
Se lo ha presentado como uno de los eruditos más grandes del siglo XX, lo cual no impide que la lectura de sus escritos suscite momentos de viva emoción o de simple distracción. Ontologías fantásticas, genealogías sincrónicas, gramáticas utópicas, geografías novelescas, múltiples historias universales, bestiarios lógicos, silogismos ornitológicos, éticas narrativas, matemáticas imaginarias, thrillers teológicos, nostálgicas geometrías y recuerdos inventados son parte del inmenso paisaje que las obras de Borges ofrece tanto a los estudiosos como al lector casual. Y sobre todas las cosas, la filosofía, concebida como perplejidad, el pensamiento como conjetura, y la poesía, la forma suprema de la racionalidad. Siendo un literato puro pero, paradójicamente, preferido por los semióticos, matemáticos, filólogos, filósofos y mitólogos, Borges ofrece -a través de la perfección de su lenguaje, de sus conocimientos, del universalismo de sus ideas, de la originalidad de sus ficciones y de la belleza de su poesía- una obra que hace honor a la lengua española y la mente universal.2
Ciego a los 55 años, personaje polémico, con posturas políticas que le impidieron ganar el Premio Nobel de Literatura al que fue candidato durante casi treinta años, Borges siempre soñó con que la posteridad le perdonara sus errores y le concediera la gloria de que se lo recordase por sus mejores textos.
Borges consideraba que había heredado dos tradiciones de sus antepasados: una militar y otra literaria. Su árbol genealógico lo entronca con ilustres familias argentinas de estirpe criolla y anglosajona, como también portuguesa. Desciende de varios militares que tomaron parte activa en la Independencia Argentina, como Francisco Narciso de Laprida, que presidió el Congreso de Tucumán y firmó el Acta de la Independencia; Francisco Borges Lafinur -su abuelo paterno- fue un coronel uruguayo; Edward Young Haslam -su bisabuelo paterno- fue un poeta romántico que editó uno de los primeros periódicos ingleses del Río de Plata, el Southern Cross; Manuel Isidoro Suárez -su bisabuelo materno- fue un coronel que luchó en las guerras de la Independencia; Juan Crisóstomo Lafinur -su tío abuelo paterno- fue un poeta argentino autor de composiciones románticas y patrióticas y profesor de Filosofía; Isidoro de Acevedo Laprida -su abuelo materno- fue un militar que luchó contra Juan Manuel de Rosas.4
Su padre, Jorge Guillermo Borges, fue un abogado argentino, nacido en la provincia de Entre Ríos, que se dedicó a impartir clases de psicología. Era un ávido lector y tenía aspiraciones literarias que concretó en una novela, El caudillo, y algunos poemas; además tradujo a Omar Jayyam de la versión inglesa de Edward Fitzgerald. Para 1970, Jorge Luis Borges recordaba con estas palabras a su padre: «El me reveló el poder de la poesía: el hecho de que las palabras sean no sólo un medio de comunicación sino símbolos mágicos y música».5 Su madre, Leonor Acevedo Suárez, era uruguaya. Aprendió inglés de su marido y tradujo varias obras de esa lengua al español. La familia de su padre tenía orígenes españoles, portugueses e ingleses; la de su madre, españoles y posiblemente portugueses. En su casa se hablaba tanto en español como en inglés.6
Borges nació el 24 de agosto de 1899 a los ocho meses de gestación, en una típica casa porteña de fines del siglo XIX, con patio y aljibe, dos elementos que se repetirán como un eco en sus poesías. Su casa natal estaba situada en la calle Tucumán 840, pero su infancia transcurrió un poco más al norte, en la calle Serrano 2135 del barrio de Palermo. La relación de Borges con la literatura comenzó a muy temprana edad, siendo que a los cuatro años ya sabía leer y escribir. Debido a que en su casa se hablaba tanto español como inglés, Borges creció como bilingüe.6 7En 1905 comenzó a tomar sus primeras lecciones con una institutriz británica.[a] Al año siguiente escribió su primer relato, La visera fatal, siguiendo páginas del Quijote. Además, esbozó en inglés un breve ensayo sobre mitología griega. A los nueve años tradujo del inglés El príncipe feliz, de Oscar Wilde, texto que se publicó en el periódico El País rubricado por Jorge Borges (h).7 En el barrio de Palermo, que por aquella época era un barrio marginal de inmigrantes y cuchilleros, conoció las andanzas de los compadritos que después poblaron sus ficciones. Borges ingresó al colegio directamente en el cuarto grado.8 El inicio de su educación formal a los 9 años y en una escuela pública fue una experiencia traumática para Borges, los compañeros se mofaban de aquel sabelotodo, que llevaba anteojos, vestía como un niño rico, no se interesaba por los deportes y hablaba tartamudeando. Durante los cuatro años de su permanencia en ese colegio, Borges no aprendió mucho más que algunas palabras en lunfardo y varias estrategias para pasar desapercibido.9
En 1914 el padre de Borges se vio obligado a dejar su profesión, jubilándose de profesor debido a la misma ceguera progresiva y hereditaria que décadas más tarde afectaría también a su hijo. Junto con la familia, se dirigió a Europa para someterse a un tratamiento oftalmológico especial. Para refugiarse de la Primera Guerra Mundial, la familia se instaló en Ginebra (Suiza), donde el joven Borges y su hermana Norah —nacida en 1902— asistirían a la escuela. Borges estudió francés y cursó el bachillerato en el Liceo Jean Calvin.8 El ambiente en aquel establecimiento de inspiración protestante era completamente distinto al de su anterior escuela de Palermo, sus compañeros, muchos de ellos extranjeros como él, apreciaban ahora sus conocimientos e inteligencia y no se burlaban de su tartamudez.10 Durante esa época leyó sobre todo a los prosistas del Realismo francés y a los poetas expresionistas y simbolistas, especialmente a Rimbaud. A la vez, descubrió a Schopenhauer, a Nietzsche, a Carlyle y a Chesterton. Con la sola ayuda de un diccionario aprendió por sí mismo el alemán y escribió sus primeros versos en francés.8
Gracias al fin de las hostilidades y después del fallecimiento de la abuela materna, la familia Borges marchó a España en 1919. Inicialmente se instalaron en Barcelona y luego se trasladaron a Palma de Mallorca. En esta última ciudad Borges escribió dos libros que no publicó: Los ritmos rojos, poemas de elogio a la Revolución rusa, y Los naipes del tahúr, un libro de cuentos. En Madrid y en Sevilla participó del movimiento literario ultraísta, que luego encabezaría en Argentina y que influiría poderosamente en su primera obra lírica. Colaboró con poemas y en la crítica literaria en las revistas Ultra, Grecia, Cervantes, Hélices y Cosmópolis.
En esta época conoció a su futuro cuñado, Guillermo de Torre, y a algunos de los principales escritores españoles de la época, como Rafael Cansinos-Assens —a quien frecuentaba en el famoso Café Colonial y a quien siempre consideró su maestro— Ramón Gómez de la Serna, Valle Inclán y Gerardo Diego.8
Inicios de su carrera literaria
El 4 de marzo de 1921, junto con su abuela paterna —Frances Haslam, quien se les había unido en Ginebra en 1916— sus padres y su hermana, Borges embarcó en el puerto de Barcelona en el Reina Victoria Eugenia, que los devolvería a Buenos Aires. En el puerto los esperaba el escritor, filósofo de la paradoja y humorista surreal Macedonio Fernández, cuya amistad Borges habría de heredar de su padre. El contacto con Buenos Aires llevó al poeta a una relación exaltada de «descubrimiento» con su ciudad natal. Así comenzó a dar forma a la mitificación de los barrios suburbanos, donde asentaría parte de su constante idealización de lo real. Ya en Buenos Aires publicó en la revista española Cosmópolis, fundó la revista mural Prisma (de la que sólo se publicaron dos números) y también publicó en Nosotros, dirigida por Alfredo Bianchi. Por esa época conoció a Concepción Guerrero, una joven de dieciséis años de quien se enamoró. En 1922 visitó a Leopoldo Lugones junto a Eduardo González Lanuza para entregarle el último número de Prisma. En agosto de 1924 fundó la revista ultraísta Proa junto con Ricardo Güiraldes, autor de Don Segundo Sombra; Alfredo Brandán Caraffa y Pablo Rojas Paz, aunque paulatinamente iría abandonando esa estética.8 12 En 1923, en víspera de un segundo viaje a Europa, Borges publicó su primer libro de poesía, Fervor de Buenos Aires, en el que se prefigura, según palabras del propio Borges, toda su obra posterior. Fue una edición preparada apuradamente, en la que se colaron algunas erratas y que, además, carecía de prólogo. Para la tapa su hermana Norah realizó un grabado. Se editaron unos trescientos ejemplares; los pocos que se conservan son considerados tesoros por los bibliófilos y en algunos se aprecian correcciones manuscritas realizadas por el mismo Borges. En Fervor de Buenos Aires es donde emotivamente confesó que, finalmente, «las calles de Buenos Aires/ya son mi entraña». Son treinta y tres poemas tan heterogéneos que aluden a un juego de cartas (el truco), o al tirano Juan Manuel de Rosas, o a la exótica Benarés; sin ahorrar el espacio para solazarse en un patio anónimo de Buenos Aires, «en la amistad oscura/ de un zaguán, de una parra y de un aljibe». Sobre el espíritu de este libro ha escrito Borges que «en aquel tiempo buscaba los atardeceres, los arrabales y la desdicha».12
Después de un año en España e instalado definitivamente en su ciudad natal a partir de 1924, Borges colaboró en algunas revistas literarias y con dos libros adicionales, Luna de enfrente e Inquisiciones —que nunca reeditó— establecería para 1925 su reputación de jefe de la más joven vanguardia. En los siguientes treinta años Borges se transformaría en uno de los más brillantes y más polémicos escritores de América. Cansado del ultraísmo que él mismo había traído de España, intentó fundar un nuevo tipo de regionalismo, enraizado en una perspectiva metafísica de la realidad. Escribió cuentos y poemas sobre el suburbio porteño, sobre el tango, sobre fatales peleas de cuchillo, como Hombre de la esquina rosada y El puñal. Pronto se cansó también de este «ismo» y empezó a especular por escrito sobre la narrativa fantástica o mágica, hasta el punto de producir durante dos décadas —desde 1930 a 1950— algunas de las más extraordinarias ficciones del siglo XX: Historia universal de la infamia, Ficciones, El Aleph, entre otros.6 7
Más tarde colaboró, entre otras publicaciones, en Martín Fierro, una de las revistas clave de la historia de la literatura argentina de la primera mitad del siglo XX. No obstante su formación europeísta, reivindicó temáticamente sus raíces argentinas, y en particular porteñas, en poemarios como Fervor de Buenos Aires (1923), Luna de enfrente (1925) y Cuaderno de San Martín (1929). Compuso letras de tangos y milongas, si bien rehuyó «la sensiblería del inconsolable tango-canción» y el manejo sistemático del lunfardo, que «infunde un aire artificioso a las sencillas coplas». En sus letras y algunos relatos se narran las dudosas hazañas de los cuchilleros y compadres, a los que muestra en toda su despojada brutalidad aunque dentro de un clima trágico, cuando no casi épico.
En 1930 Borges publicó el ensayo Evaristo Carriego y prologó una exposición del pintor uruguayo Pedro Figari. Además, conoció a un joven escritor de solo 17 años, que luego sería su amigo y con el que publicaría numerosos textos, Adolfo Bioy Casares.13 En el primer número de la revista Sur, dirigida por Victoria Ocampo, Borges colaboró con un artículo dedicado al coronel Ascasubi. En este primer número, publicado en 1931, también contribuyeron la propia Victoria Ocampo, Waldo Frank, Alfonso Reyes Ochoa, Jules Supervielle, Ernest Ansermet, Walter Gropius, Ricardo Güiraldes y Pierre Drieu la Rochelle.7 Borges publicó dos años más tarde una colección de ensayos y crítica literaria titulada Discusión, la que abarca temas tan diversos como la poesía gauchesca, la Cábala, temas filosóficos, el arte narrativo y hasta su opinión sobre clásicos del cine. El 12 de agosto de 1933 comenzó a dirigir, junto con Ulyses Petit de Murat, la Revista Multicolor de los Sábados, suplemento cultural impreso a color del diario populista Crítica que duraría hasta octubre de 1934.14 En 1935 editó Historia universal de la infamia, una serie de relatos breves, entre ellos, Hombre de la esquina rosada.15 Allí sigue interesado en el perfil mítico de Buenos Aires iniciado en Evaristo Carriego. Al año siguiente se publicaron los ensayos de Historia de la eternidad, donde —entre otros temas— Borges indaga sobre la metáfora. En la revista quincenal El Hogar, comenzó a publicar la columna de crítica de libros y autores extranjeros hasta 1939. Allí publicó quincenalmente gran cantidad de reseñas bibliográficas, biografías sintéticas de escritores y ensayos. Colaboró también en la revista Destiempo, editada por Adolfo Bioy Casares y Manuel Peyrou, con ilustraciones de Xul Solar. Para la editorial Sur tradujo A Room of One’s Own, de Virginia Woolf y al año siguiente la novela Orlando de la misma autora. En 1937 publicó Antología clásica de la literatura argentina.
El Borges vanguardista y más tarde terruñero pasó, en la década de los 30, al Borges de la revista Sur, con su cosmopolitismo de alto vuelo; al Borges metafísico que especuló sobre el tiempo y el espacio y lo infinito, la vida y la muerte y si hay destino para el hombre; al Borges que hace alardes de erudición y que ya pergeña sus celebérrimos textos trampa: comentarios exhaustivos, por ejemplo, de libros que no existen, o relatos que juntan y mezclan lo real con lo ficticio. También se percibe un cambio en materia de estilo, una labor de poda en las prosas y los metros, que pasan a ser más clásicos, más nítidos, más sencillos.16
Los años finales de esta década fueron funestos para Borges: primero vino la muerte de la abuela Fanny; después, la del padre, precedida de una muy lenta y penosa agonía.17 Borges se vio arrojado de una vez pero contundentemente al mundo de los adultos responsables. Tenía que hacer lo que todos hacían desde edades bastante más tempranas: trabajar, sacar adelante una familia. En esto tuvo suerte: con la ayuda del poeta Francisco Luis Bernárdez, consiguió en 1938 un empleo en la biblioteca municipal Miguel Cané del barrio porteño de Almagro. En esta poco concurrida biblioteca pudo seguir haciendo lo que solía, pasarse los días entre libros, leyendo y escribiendo.16 Después, el mismo Borges sufrió un grave accidente, al golpearse la cabeza con una ventana, lo que lo llevó al borde de la muerte por septicemia y que, oníricamente, reflejará en su cuento El sur. En la convalecencia escribió el cuento Pierre Menard, autor del Quijote. Esos sueños de convaleciente le sirvieron para escribir páginas espléndidas; fantasiosas pero tramadas por su inconfundible mente de siempre, lúcida y penetrante. Borges salió del trance afianzado en la idea que venía rumiando desde hacía tiempo: que la realidad empírica es tan ilusoria como el mundo de las ficciones, pero inferior a éste, y que sólo las invenciones pueden suministrarnos herramientas cognoscitivas confiables.18
En 1940 publicó Antología de literatura fantástica, en colaboración con Bioy Casares y Silvina Ocampo, quienes ese mismo año contrajeron matrimonio, siendo Borges el testigo de su boda. Prologó, además, el libro de Bioy Casares La invención de Morel.6 14 Publicó en 1941 Antología Poética Argentina y editó el volumen de narraciones El jardín de senderos que se bifurcan, obra con la que se hizo acreedor al Premio Nacional de Literatura. Al año siguiente apareció Seis problemas para don Isidro Parodi, libro de narraciones que escribió en colaboración con Bioy Casares. Lo firmaron con el seudónimo «H. Bustos Domecq», el cual proviene de «Bustos», un bisabuelo cordobés de Borges, y «Domecq», un bisabuelo de Bioy Casares. Bajo el título Poemas (1923-1943) reunió en 1943 la labor poética de sus tres libros más los poemas publicados en el diario La Nación y en la revista Sur. Presentó, junto con Bioy Casares, la antología Los mejores cuentos policiales. Para esta época, Borges ya había logrado un espacio en el reducido círculo de la vanguardia literaria argentina. Su obra Ficciones recibió el Gran Premio de Honor de la Sociedad Argentina de Escritores (SADE). En sus páginas se halla Tlön, Uqbar, Orbis Tertius, sobrecogedora e insuperable metáfora del mundo.14
En una reunión en la casa de Bioy Casares y Silvina Ocampo, Borges conoció en agosto de 1944 a Estela Canto, una joven atractiva, inteligente, cultivada y poco convencional, que llamó su atención —acostumbrado a tratar en los círculos literario y social con mujeres convencionales de la clase media o alta— y de quien se enamoró sin ser correspondido. Estela era una mujer vanidosa y hasta su muerte se ufanaba de haber conquistado el amor, y después la amistad de Borges, así como de haber sido la destinataria de una colección de cartas de amor que mostraban hasta qué punto el autor de Ficciones, que detestaba el sentimentalismo en la literatura, podía ser profundamente sentimental en la vida.19 En su libro de memorias, Canto escribió:
La actitud de Borges me conmovía. Me gustaba lo que yo era para él, lo que él veía en mí. Sexualmente me era indiferente, ni siquiera me desagradaba. Sus besos torpes, bruscos, siempre a destiempo, eran aceptados condescendientemente. Nunca pretendí sentir lo que no sentía20
La figura de Estela le inspiró a Borges ciertos aspectos de El Aleph, uno de sus mejores cuentos. El le dedicó a ella ese relato y le regaló el manuscrito original, el cual Estela hizo subastar cuatro décadas más tarde en Sotheby y fue vendido en más de 25.000 dólares a la Biblioteca Nacional de España.19 Desafiando a su madre, para quien Estela era una desclasada, Borges le propuso casamiento. Ese amor no consumado, siempre agónico, terminó de morir hacia fines de 1952.21
En colaboración con Silvina Bullrich publicó El compadrito en 1945. Junto con Bioy Casares publicó en 1946 Un modelo para la muerte utilizando el seudónimo «B. Suárez Lynch» y, como H. Bustos Domecq, Dos fantasías memorables, volumen de historias de suspenso policial. Borges aclaró posteriormente que «Suárez» provenía de su abuelo y que «Lynch» representaba el lado irlandés de la familia de Bioy. Fundó y dirigió la revista Los Anales de Buenos Aires (que concluiría, tras 23 números, en diciembre de 1948). En la publicación, Borges y Bioy colaboraron con un nuevo seudónimo: «B. Lynch Davis». Entre 1947 y 1948 editó el ensayo Nueva refutación del tiempo y publicó sus Obras Escogidas. En 1949 se editó su célebre obra narrativa El Aleph, libro de género fantástico y que para la crítica es casi unánimemente su mejor colección de relatos.22
En 1946 Juan Domingo Perón fue elegido presidente, venciendo así a la Unión Democrática. Borges, que había apoyado a ésta última, se manifestaba abiertamente en contra del nuevo gobierno. Su fama de antiperonista lo acompañó toda su vida. Respecto al nuevo gobierno, que Borges consideraba una dictadura, manifestó:
Las dictaduras fomentan la opresión, las dictaduras fomentan el servilismo, las dictaduras fomentan la crueldad; más abominable es el hecho de que fomenten la idiotez. Botones que balbucean imperativos, efigies de caudillos, vivas y mueras prefijados, ceremonias unánimes, la mera disciplina usurpando el lugar de la lucidez... Combatir estas tristes monotonías es uno de los muchos deberes del escritor ¿Habré de recordar a los lectores del Martín Fierro y de Don Segundo Sombra que el individualismo es una vieja virtud argentina?
Borges se sintió obligado a renunciar a su empleo como bibliotecario cuando fue designado «Inspector de mercados de aves de corral» por el gobierno. Su madre y su hermana, también antiperonistas, fueron detenidas por la policía.[b] Borges fue llevado por la necesidad a convertirse en conferencista itinerante por diversas provincias argentinas y Uruguay. Para ello, debió superar su tartamudez y su timidez con ayuda médica. La necesidad también lo llevó a iniciarse en la tarea docente como profesor de literatura inglesa en el Instituto Libre de Segunda Enseñanza y, más tarde, en la Universidad Católica.22
Jorge Luis Borges en 1951.
Los albores de la década de 1950 marcaron el inicio del reconocimiento de Borges dentro y fuera de Argentina. La Sociedad Argentina de Escritores lo nombró presidente en 1950, cargo al que renunciaría tres años más tarde. Dictó conferencias en la Universidad de la República de Uruguay, donde apareció su ensayo Aspectos de la literatura gauchesca. Editó en México Antiguas literaturas germánicas, escrito en colaboración con Delia Ingenieros. También en ese mismo año se publicó en París la primera traducción francesa de su narrativa (Fictions) y en Buenos Aires la serie de cuentos La muerte y la brújula. En 1952 aparecieron los ensayos de Otras inquisiciones y se reeditó un ensayo sobre lingüística porteña titulado El idioma de los argentinos, junto con El idioma de Buenos Aires de José Edmundo Clemente. Apareció también la segunda edición de El Aleph, con nuevos cuentos. Algunas narraciones de este libro fueron traducidas al francés por Roger Caillois y publicadas en París en 1953 con el nombre de Labyrinthes. Ese año Borges publicó El Martín Fierro, ensayo que tuvo una segunda edición dentro del año. Bajo el cuidado de José Edmundo Clemente, la editorial Emecé comenzó a publicar sus Obras Completas. En 1954 el director cinematográfico Leopoldo Torre Nilsson dirigió el film Días de odio, basado en el cuento de Borges Emma Zunz.23
Tras un golpe militar —denominado Revolución Libertadora— que derrocó al gobierno peronista, Borges fue elegido en 1955 director de la Biblioteca Nacional, cargo que ocuparía por espacio de 18 años. En diciembre de ese mismo año fue designado miembro de la Academia Argentina de Letras. Publicó Los orilleros, El paraíso de los creyentes, Cuentos breves y extraordinarios, Poesía gauchesca, La hermana Eloísa y Leopoldo Lugones. Se le confirmó, además, en la cátedra de Literatura Alemana y, luego, como director del Instituto de Literatura Alemana en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Buenos Aires. La revista Ciudad le dedicó un volumen crítico y bibliográfico sobre su obra. Apareció Ficciones en italiano, bajo el título La Biblioteca di Babele. Tras varios accidentes y algunas operaciones, un oftalmólogo le prohibió leer y escribir. Aunque aún distinguía luces y sombras, esta prohibición cambió profundamente su práctica literaria. Borges se fue quedando ciego como consecuencia de la enfermedad congénita que había ya afectado a su padre. El hecho no fue repentino («Se ha extendido desde 1899 sin momentos dramáticos, un lento crepúsculo que duró más de medio siglo»)24 ), sino que más bien se trató de un proceso; como fuere, esto no le impidió seguir con su carrera de escritor, ensayista y conferencista, así como tampoco significó para él el abandono de la lectura —hacía que le leyesen en voz alta— ni del aprendizaje de nuevas lenguas.23 El haber sido nombrado director de la Biblioteca Nacional y, en el mismo año, comprender la profundización de su ceguera fue percibido por Borges como una contradicción del destino. Él mismo lo relató en una conferencia dos décadas más tarde: «Poco a poco fui comprendiendo la extraña ironía de los hechos. Yo siempre me había imaginado el Paraíso bajo la especie de una biblioteca. Ahí estaba yo. Era, de algún modo, el centro de novecientos mil volúmenes en diversos idiomas. Comprobé que apenas podía descifrar las carátulas y los lomos. Entonces escribí el Poema de los dones»:25
Nadie rebaje a lágrima o reproche
esta declaración de la maestría
de Dios, que con magnífica ironía
me dio a la vez los libros y la noche.26
En 1956 dictó el curso de literatura inglesa en la Universidad de Buenos Aires, fue nombrado catedrático titular en la misma universidad, recibió un doctorado Honoris Causa de la Universidad de Cuyo y fue nombrado presidente de la Asociación de Escritores Argentinos. En Montevideo criticó ásperamente al peronismo depuesto y defendió a la Revolución Libertadora. Por su adhesión al nuevo gobierno resultó muy criticado, entre otros, por Ernesto Sabato y Ezequiel Martínez Estrada. Sabato y Borges continuarían, si bien no enemistados, «separados» por motivos políticos hasta 1973, cuando, a raíz de un encuentro casual en una biblioteca, Orlando Barone resolvió promover una serie de reuniones, en las que ambos escritores discutieron sobre literatura, filosofía, cine, lingüística y demás temas. El resultado de estas reuniones fue la edición de un libro: Diálogos: Borges-Sabato.23
Entre 1957 y 1960 publicó Manual de zoología fantástica y El Hacedor, una colección de textos breves y poemas dedicada a Leopoldo Lugones. Hizo una nueva actualización de Poemas y publicó en el diario La Nación el poema Límites. Bajo su dirección se inició la segunda época de la revista La Biblioteca y, en colaboración con Bioy Casares, editó la antología Libro del cielo y del infierno. Sus obras continuaron traduciéndose a varios idiomas:27 en este período en particular Otras inquisiciones fue traducido al francés bajo el título Enquétes, El Aleph al alemán con el título Labyrinthe y una selección de cuentos de El Aleph y Ficciones al italiano como L'Aleph. En este período también aparecieron los volúmenes sexto a noveno de las Obras Completas. Para 1960 se vinculó con el Partido Conservador.6 23 Compartió con Samuel Beckett, en 1961, el Premio Internacional de Literatura (consistente en 10 mil dólares), otorgado por el Congreso Internacional de Editores en Formentor, Mallorca. Este importante galardón lo promovió internacionalmente y le ofreció la posibilidad de que sus obras fueran traducidas a numerosos idiomas (inglés, francés, alemán, sueco, noruego, danés, italiano, polaco, portugués, hebreo, farsí, griego, eslovaco y árabe, entre otros). Apareció su Antología personal, editada por Sur. Viajó junto a su madre a Estados Unidos, invitado por la Universidad de Texas y por la Fundación Tinker, de Austin. Allí dictó conferencias y cursos sobre literatura argentina durante seis meses. En Nueva York se editó una antología de sus cuentos titulada Labyrinths y se tradujo al alemán Historia universal de la infamia. En 1962 se estrenó el film Hombre de la esquina rosada, basado en el cuento homónimo, que dirigió René Mugica. Finalizó una biografía sobre el poeta Almafuerte. En compañía de su madre, viajó a Europa en 1963 y ofreció numerosas conferencias. De regreso a Buenos Aires terminó una antología sobre Evaristo Carriego.28
Con la colaboración de María Esther Vázquez publicó Introducción a la literatura inglesa en 1965 y Literaturas germánicas medievales en 1966. Al año siguiente se editó Introducción a la literatura norteamericana, escrito en colaboración con Esther Zemborain y Crónicas de Bustos Domecq, con Bioy Casares. Se editaron, además, sus milongas y tangos en el libro Para las seis cuerdas, ilustrado por Héctor Basaldúa, y su cuento La intrusa.6 28
El 21 de septiembre de 1967 Borges, de 68 años, se casó por iglesia con Elsa Astete Millán, viuda de 57 años. Durante los primeros tiempos, la pareja vivió en la casa de él, compartiendo sus días con Leonor Acevedo. En el recuerdo de Elsa la madre del escritor no intervino para perjudicar la relación. No obstante, según los amigos de Borges, los celos de Doña Leonor eran terribles. Unos meses después del casamiento, la pareja se mudó a un departamento, donde hicieron por primera vez la experiencia de vivir juntos y solos, y allí la rivalidad entre su esposa y su madre cobró mayor virulencia y el escritor tuvo que empezar a visitar a escondidas a Leonor. Esa experiencia, además, llevaría a la pareja a enfrentar definitivamente la realidad: la convivencia era intolerable. En una entrevista publicada en 1993, Elsa admitió que no fue feliz junto a Borges: «Era introvertido, callado y poco cariñoso. Era etéreo, impredecible. No vivía en un mundo real».29 El matrimonio duró hasta octubre de 1970.
En 1968, con la colaboración de Margarita Guerrero, publicó una ampliación del Manual de zoología fantástica bajo el título El libro de los seres imaginarios. Apareció en ese año su Nueva antología personal. Viajó a Santiago de Chile para asistir al Congreso de Intelectuales Antirracistas y a Europa e Israel para pronunciar algunas conferencias. El director Hugo Santiago dirigió la película Invasión, con argumento de Bioy y Borges. En 1969 ordenó y corrigió dos libros de poemas: El otro, el mismo y Elogio de la sombra, el cual logró dos ediciones dentro del año. Con ilustraciones del pintor Antonio Berni, se editó su traducción y antología de Hojas de hierba, de Walt Whitman. Después de algunos años sin publicar cuentos, reunió varias narraciones en El informe de Brodie, libro publicado en agosto de 1970.6 28
En 1971 Borges publicó en Buenos Aires el cuento largo titulado El congreso. Al año siguiente viajó a Estados Unidos, donde recibió numerosas distinciones y pronunció conferencias en diversas universidades. A su regreso a Buenos Aires publicó el libro de poemas El oro de los tigres y el 24 de agosto, día de su cumpleaños, recibió un homenaje singular: la publicación en forma privada de su cuento El otro. En 1973 fue declarado Ciudadano Ilustre de la Ciudad de Buenos Aires y, paralelamente, solicitó su jubilación como director de la biblioteca nacional. En 1973 reunió por primera vez en un volumen sus Obras Completas, editadas por Emecé.
Como De Quincey y tantos otros, he sabido, antes de haber escrito una sola línea, que mi destino sería literario. Mi primer libro data de 1923; mis Obras Completas, ahora, reúnen la labor de medio siglo. No sé que mérito tendrán, pero me place comprobar la variedad de temas que abarcan. La patria, los azares de los mayores, las literaturas que honran las lenguas de los hombres, las filosofías que he tratado de penetrar, los atardeceres, los ocios, las desgarradas orillas de mi ciudad, mi extraña vida cuya posible justificación está en estas páginas, los sueños olvidados y recuperados, el tiempo....La prosa convive con el verso; acaso para la imaginación ambas son iguales. Jorge Luis Borges. Obras Completas. Prólogo.30
En Milán, Franco Maria Ricci publicó el cuento El congreso en una edición lujosísima con letras de oro. El libro de poesía La rosa profunda y la colección de relatos El libro de arena se publicaron en 1975, junto con la recopilación Prólogos. Se estrenó además la película El muerto, sobre un cuento homónimo, dirigida por Héctor Olivera.
Ante una nueva victoria del peronismo, Borges insistió en recordar al primer gobierno de Perón como "los años de oprobio". En 1975 falleció su madre, a los noventa y nueve años. A partir de ese momento Borges realizaría sus viajes junto a una ex-alumna, luego secretaria y —por último, en la senectud de Borges— su segunda esposa, María Kodama.
En 1986 fijó su residencia en Ginebra, ciudad a la que lo unía un profundo amor y a la cual Borges había designado una de mis patrias. El 26 de abril se casó —por poderes— con María Kodama, según Acta de esa fecha labrada en Colonia Rojas Silva, Paraguay. Murió el 14 de junio de 1986 víctima de un cáncer hepático. Obedeciendo su última voluntad, sus restos yacen en el cementerio de Plain Palais [c].31 32 La lápida,33 realizada por el escultor argentino Eduardo Longato, es de una piedra blanca y áspera. En lo alto de su cara anterior se lee Jorge Luis Borges y, debajo, «And ne forhtedon na», junto a un grabado circular con siete guerreros, una pequeña Cruz de Gales y los años "1899/1986" 34 La inscripción «And ne forhtedon na», formulada en anglosajón, se traduce como «Y que no temieran» [d]. La cara posterior de la lápida contiene la frase Hann tekr sverthit Gram okk / legger i methal theira bert, que se corresponde con dos versos del capítulo veintisiete de la Saga Volsunga (saga noruega del siglo XIII), y se traducen como «El tomó su espada, Gram, y colocó el metal desnudo entre los dos» [e]. Estos dos mismos versos los utilizó también Borges como epígrafe de su cuento Ulrica, incluido en El libro de arena, único relato de amor del autor y cuyo protagonista se llama Javier Otárola. Bajo esta segunda inscripción aparece el grabado de una nave vikinga, y bajo ésta una tercera inscripción: «De Ulrica a Javier Otárola», lo que permite interpretar esta última inscripción como una dedicatoria de María Kodama a Jorge Luis Borges.31 35
En febrero de 2009,36 se presentó un proyecto para trasladar sus restos al cementerio porteño de la Recoleta. Se generó una importante polémica,37 su viuda María Kodama se opuso rotundamente y finalmente el proyecto quedó desechado.
Bibliografía
• Historia universal de la infamia (1935)
El espantoso redentor Lazarus Morell.
El impostor inverosímil Tom Castro.
La viuda Ching, pirata puntual.
El proveedor de iniquidades Monk Eastman.
El asesino desinteresado Bill Harrigan.
El incivil maestro de ceremonias Kotsuké no Suké.
El tintorero enmascarado Hákim de Merv.
Hombre de la esquina rosada.
Un teólogo en la muerte.
La cámara de las estatuas.
Del Libro de las 1001 Noches, noche 272.
Historia de los dos que soñaron.
Del Libro de las 1001 Noches, noche 351.
El brujo postergado.
El espejo de tinta.
• Ficciones (1944), el cual consta de dos secciones y las siguientes narraciones:
I. El jardín de senderos que se bifurcan
Prólogo
Tlön, Uqbar, Orbis Tertius
El acercamiento a Almotásim
Pierre Menard, autor del Quijote
Las ruinas circulares
La lotería en Babilonia
Examen de la obra de Herbert Quain
La Biblioteca de Babel
El jardín de senderos que se bifurcan
II. Artificios
Prólogo
Funes el memorioso
La forma de la espada
Tema del traidor y del héroe
La muerte y la brújula
El milagro secreto
Tres versiones de Judas
El fin
La secta del Fénix
El Sur
• El Aleph (1949), consta de 17 cuentos:
El inmortal.
El muerto.
Los teólogos.
Historia del guerrero y la cautiva.
Biografía de Tadeo Isidoro Cruz (1829-1874).
Emma Zunz,
La casa de Asterión
La otra muerte.
Deutsches Requiem.
La busca de Averroes.
El Zahir
La escritura del Dios.
Abenjacán el Bojarí, muerto en su laberinto.
Los dos reyes y los dos laberintos.
La espera.
El hombre en el umbral.
El Aleph.
• La muerte y la brújula (1951)
Hombre de la esquina rosada.
Emma Zunz.
La espera.
Funes el memorioso.
La forma de la espada.
Tema del traidor y del héroe.
El jardín de senderos que se bifurcan.
El milagro secreto.
La muerte y la brújula.
• El informe de Brodie (1970)
La intrusa.
El indigno.
Historia de Rosendo Juárez.
El encuentro.
Juan Muraña.
La señora mayor.
El duelo.
El otro duelo.
Guayaquil.
El evangelio según Marcos.
El informe de Brodie.
• El libro de arena (1975).
El otro.
Ulrica.
El Congreso.
There are more things.
La Secta de los Treinta.
La noche de los dones.
El espejo y la máscara.
Undr.
Utopía de un hombre que está cansado.
El soborno.
Avelino Arredondo.
El disco.
El libro de arena.
Epílogo.
• La memoria de Shakespeare (1983)
Veinticinco de agosto de 1983.
Tigres azules.
La rosa de Paracelso.
La memoria de Shakespeare.
Ensayos
• Inquisiciones (1925)
• El tamaño de mi esperanza (1926)
• El idioma de los argentinos (1928)
• Evaristo Carriego (1930)
• Discusión (1932)
• Historia de la eternidad (1936)
• Otras inquisiciones (1952).
• Siete Noches (1980)
• Nueve ensayos dantescos (1982)
• Atlas (1985)
Poesías
• Fervor de Buenos Aires (1923)
• Luna de enfrente (1925)
• Cuaderno San Martín (1929)
• El hacedor (1960)
• El otro, el mismo (1964)
• Para las seis cuerdas (1965)
• Elogio de la sombra (1969)
• El oro de los tigres (1972)
• La Rosa Profunda (1975)
• La moneda de hierro (1976)
• Historia de la Noche (1977)
• Adrogué (1977)
• La Cifra (1981)
• Los Conjurados (1985)
Antologías
• Antología personal (1961)
• Nueva antología personal (1968).
• Libro de sueños (1976)
• Textos cautivos (1986).
• Borges en el hogar (2000).
Obras en colaboración
• Índice de la poesía americana (16), antología con Vicente Huidobro y Alberto Hidalgo
• Antología clásica de la literatura argentina (1937), con Pedro Henríquez Ureña
• Antología de la literatura fantástica (1940), con Bioy Casares y Silvina Ocampo
• Antología poética argentina (1941), con Bioy Casares y Silvina Ocampo
• Seis problemas para don Isidro Parodi (1942), con Bioy Casares
• El compadrito (1945), antología de textos de autores argentinos en colaboración con Silvina Bullrich
• Dos fantasías memorables (1946), con Bioy Casares
• Un modelo para la muerte (1946), con Bioy Casares
• Obras escogidas (1948).
• Antiguas literaturas germánicas (México, 1951), con Delia Ingenieros
• El idioma de Buenos Aires (1952), con José Edmundo Clemente
• Obras completas (1953)
• El Martín Fierro (1953), con Margarita Guerrero
• Poesía gauchesca (1955), con Bioy Casares
• Cuentos breves y extraordinarios (1955), con Bioy casares
• El paraíso de los creyentes (1955), con Bioy casares
• Leopoldo Lugones (1955), con Betina Edelberg
• Los orilleros (1955), con Bioy Casares
• La hermana Eloísa (1955), con Luisa Mercedes Levinson
• Manual de zoología fantástica (México, 1957), con Margarita Guerrero
• Los mejores cuentos policiales (1943 y 1956), con Bioy Casares
• Libro del cielo y del infierno (1960), con Bioy Casares
• Introducción a la literatura inglesa (1965), con María Esther Váquez
• Literaturas germánicas medievales (1966), con María Esther Vázquez, revisa y corrige el tratado Antiguas literaturas germánicas
• Introducción a la literatura norteamericana (1967), con Estela Zemborain de Torres
• Crónicas de Bustos Domecq (1967), con Bioy Casares.
• El libro de los seres imaginarios (1967), escrito en colaboración con Margarita Guerrero.
• Nueva antología personal (1968).
• Prólogos (1975).
• ¿Qué es el budismo? (1976), con Alicia Jurado
• Diálogos (1976), con Ernesto Sabato
• Nuevos cuentos de Bustos Domecq (1977), con Bioy Casares
• Breve antología anglosajona (1978), con María Kodama
• Obras completas en colaboración (1979)
• Atlas (1985), con María Kodama
• Textos cautivos (1986), textos publicados en la revista El hogar
Guiones de cine
• Los orilleros (1939). Escrito en colaboración con Adolfo Bioy Casares
• El paraíso de los creyentes (1940). Escrito en colaboración con Adolfo Bioy Casares
• Invasión (1969). Escrito en colaboración con Adolfo Bioy Casares y Hugo Santiago.
• Les autres (1972). Escrito en colaboración con Hugo Santiago
Fragmento de su primera novela "Himno al mar"
Oh mar! oh mito! oh largo lecho!
Y sé por qué te amo. Sé que somos muy viejos.
Que ambos nos conocemos desde siglos.
Sé que en tus aguas venerandas y rientes ardió la aurora de la Vida.
(En la ceniza de una tarde terciaria vibré por primera vez en tu seno).
Oh proteico, yo he salido de ti.
¡Ambos encadenados y nómadas;
Ambos con un sed intensa de estrellas;
Ambos con esperanzas y desengaños;
Ambos, aire, luz, fuerza, oscuridades;
Ambos con nuestro vasto deseo y ambos con nuestra grande miseria.11
José Emilio Pachecos
De gran humanidad, simpatía y modestia, junto con una portentosa erudición, fue reconocido como hombre de letras desde muy joven. En la década de los cincuenta ya figuraba en antologías al lado de los grandes poetas latinoamericanos. Estudió en La Universidad Nacional Autónoma de México, donde inició sus actividades literarias en la revista Medio Siglo; tradujo del inglés y publicó libros de lírica y narrativa; también trabajó dirigiendo y editando colecciones bibliográficas y diversas publicaciones y suplementos culturales. Al lado de Carlos Monsiváis, compartió la dirección del suplemento de la revista Estaciones; fue secretario de redacción de la Revista de la Universidad de México y de México en la Cultura, suplemento de Novedades, y fue jefe de redacción de La Cultura en México, suplemento de Siempre!. Dirigió la colección Biblioteca del Estudiante Universitario publicada por la UNAM, que reúne obras literarias desde el pasado prehispánico al México contemporáneo. Es especialista en Literatura Mexicana del siglo XIX, así como profundo conocedor de la obra de Jorge Luis Borges, en cuyo honor dictó una serie de conferencias en 1999. Fue investigador del Centro de Estudios Históricos del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) desde hace décadas y ha sido profesor en la Universidad Nacional Autónoma de México, en la Universidad de Maryland (College Park), en la Universidad de Essex y en algunas otras de Estados Unidos, Canadá, y Reino Unido.
Entre otros galardones ha recibido el Premio Cervantes (2009); el Premio Reina Sofía de Poesía Iberoamericana (2009); el José Donoso (2001); el Octavio Paz (2003); el Pablo Neruda (2004); el Ramón López Velarde (2003); el Alfonso Reyes (2004); el José Asunción Silva (1996); el Xavier Villaurrutia (1973); y el García Lorca (2005).
En la actualidad José Emilio Pacheco es una figura central de la literatura mexicana y miembro del El Colegio Nacional desde 1986; ingresó en éste con la lectura de su ensayo A ciento cincuenta años de la Academia de Letrán.1 Desde 1994 es creador emérito del Sistema Nacional de Creadores Artísticos (SNCA). Fue nombrado miembro honorario de la Academia Mexicana de la Lengua en mayo de 2006.2
Su estilo es conversacional y coloquial, claro y antirretórico; su gran tema es el tiempo: cada poema suyo analiza imaginativamente un elemento que forma la corriente de lo cotidiano; asumiendo valores humanos éticos y sociales, otras veces reflexiona sobre el propio papel de la poesía. Como afirma Carlos Monsiváis, en su obra domina
La pasión por la metáfora, la concentración en unas cuantas líneas de un relato casi siempre pesaroso, el gusto por los relatos inesperados, el despliegue del poder de síntesis, el ejercicio múltiple de la metáfora, el juego de analogías como espejos de la devastación, la alabanza jubilosa del paisaje. En poesía, ajusta sus dones melancólicos, su pesimismo que es resistencia al autoengaño, su fijación del sitio de la crueldad en el mundo, su poderío aforístico.3
La mayoría de sus títulos poéticos están recogidos en el libro Tarde o temprano (Poemas 1958 - 2000) (México: FCE, 2000), que reúne sus primeros seis libros de poemas: Los elementos de la noche, El reposo del fuego, No me preguntes cómo pasa el tiempo, Irás y no volverás, Islas a la deriva, Desde entonces, a los que han seguido Los trabajos del mar, Miro la tierra, Ciudad de la memoria y un volumen de versiones poéticas: Aproximaciones. Es autor de dos novelas, Morirás lejos y Las batallas en el desierto, y de tres libros de cuentos: La sangre de Medusa, El viento distante y El principio del placer. Es notoria su labor literaria, periodística, historiográfica y política. Junto al célebre ensayista Carlos Monsiváis y el laureado con el Premio Nobel Octavio Paz creó la antología Ómnibus de Poesía Mexicana. Con su ensayo-discurso acerca de la literatura mexicana --"A 150 años de la Academia de Letrán"-- ingresó el 10 de julio de 1986 en el Colegio Nacional de México. Como traductor se le deben en especial versiones de Cuatro cuartetos, de T. S. Eliot, de Cómo es (Samuel Beckett), Un tranvía llamado deseo (Tennessee Williams), Vidas imaginarias (Marcel Schwob) y De profundis (Óscar Wilde). Ha editado la Antología del Modernismo y obras de autores como Federico Gamboa y Salvador Novo.
Su poema Alta traición es quizá el más célebre entre la juventud mexicana. En su obra narrativa transfigura el mundo infantil y adolescente en el escenario cada vez más ruinoso de la ciudad de México (El viento distante y otros relatos (1963), El principio del placer (1972), Las batallas en el desierto (1981)... En Morirás lejos (1967) trata sobre distintas épocas de persecución (nazismo, guerra romana contra los judíos).
El 21 de abril de 2010 deja una serie de objetos en la Caja de las Letras del Instituto Cervantes para que se abran 100 años después, en 2110. En el momento de depositarlo dijo:4
Lo dejo para que quien abra esto en cien años sepa quien fui, porque no creo que nadie recuerde mi obra
Premios y Reconocimientos
Ha obtenido los siguientes premios literarios - es decir los principales reconocimientos a su labor como poeta y ensayista:
• Premio Magda Donato por Morirás lejos -- 1967
• Premio Nacional de Poesía Aguascalientes por No me preguntes cómo pasa el tiempo--1969
• Premio Xavier Villaurrutia por El principio del placer -- 19735
• Premio Nacional de Periodismo de México por Divulgación Cultural -- 19806 7
• Premio Malcolm Lowry por trayectoría (Ensayo literario) -- 19918
• Premio Nacional de Lingüística y Literatura -- 19929
• Premio José Asunción Silva al mejor libro de poemas en español -- publicado entre 1990 y 1995
• Premio Iberoamericano de Letras José Donoso -- 2001
• Premio Internacional Octavio Paz de Poesía y Ensayo -- 2003
• Premio de Poesía Iberoamericana Ramón López Velarde -- 2003
• Premio Internacional Alfonso Reyes -- 2004
• Premio Iberoamericano de Poesía Pablo Neruda -- 2004
• Premio Internacional de Poesía Ciudad de Granada - Federico García Lorca -- 2005
• Premio Reina Sofía de Poesía Iberoamericana -- 7 de mayo de 2009
• La Medalla 1808 otorgada por el Gobierno del Distrito Federal -- 25 de junio de 200910
• La Medalla de Oro de Bellas Artes otorgada por la Secretaría de Educación Pública de México -- 28 de junio de 200911
• Premio Cervantes de las letras -- 200912
• Doctorado honoris causa por la Universidad Autónoma de Nuevo León -- 11 de septiembre de 2009
• Doctorado honoris causa por la Universidad Autónoma de Campeche -- 3 de marzo de 2010
• Doctorado honoris causa por la Universidad Nacional Autónoma de México -- 23 de septiembre de 2010
Bibliografía
Lírica
• Los elementos de la noche (1963)
• El reposo del fuego (1966)
• No me preguntes cómo pasa el tiempo (1970)
• Irás y no volverás (1973)
• Islas a la deriva (1976)
• Desde entonces (1979)
• Los trabajos del mar (1984)
• Miro la tierra (1987)
• Ciudad de la memoria (1990)
• El silencio de la luna (1996)
• La arena errante (1999)
• Siglo pasado (2000)
• Tarde o temprano (2000; poesía completa, ampliada en la edición de 2010)
• Como la lluvia (2009)
• La edad de las tinieblas (2009)
• Un tranvía llamado deseo traducción al español de la obra de Tennessee Williams,(2010)
Narrativa
• La sangre de Medusa y otros cuentos marginales (1959)
• El viento distante (1963)
• Morirás lejos (1967)
• El principio del placer (1972)
• Las batallas en el desierto (1981)
• Tarde de agosto (1992)
Otros
• 1987. Dirigida por Alberto Isaac y adaptada por Vicente Leñero, se presenta la película "Mariana, Mariana", adaptación de Las batallas en el desierto. Actúan Luis Mario y Gerardo Quiroz, Pedro Armendáriz Jr., Aarón Hernán, Saby Kamalich y Elizabeth Aguilar.
• 1992. Café Tacuba en su disco con el mismo nombre presenta la canción Las Batallas, basada en la historia del libro Batallas en el desierto.
• 1995. La Orquesta Sinfónica de Nuevo León, en su Temporada de Jóvenes Valores Estrena "El reposo del Fuego", Obra Sinfónica para Tenor y Orquesta Sinfónica, compuesta por el compositor regiomontano Gustavo A. Farías García, con poemas del libro homónimo de José Emilio Pacheco.
Predecesor:
Juan Marsé
Premio Miguel de Cervantes
2009
Sucesor:
-
Notas
1. ↑ El Colegio Nacional. «Miembros poesía y narrativa, José Emilio Pacheco». Consultado el 1 de diciembre de 2009.
2. ↑ «Académicos honorarios de la Academia Mexicana de la Lengua». Consultado el 13 de noviembre de 2009.
3. ↑ Carlos Monsiváis (1 de diciembre de 2009). «El poder de síntesis». El País. Consultado el 1 de diciembre de 2009.
4. ↑ Pacheco deja en la Caja de las Letras el legado de "una época oscura"
5. ↑ «Premio Xavier Villaurrutia». El poder de la palabra. Consultado el 7 de diciembre de 2009.
6. ↑ Periódico el Universal
7. ↑ Premio Nacional de Periodismo. «Historia 1975-2001». Consultado el 5 de marzo de 2010.
8. ↑ Coordinación Nacional de Lectura del INBA
9. ↑ Consejo Nacional para la Cultura y las Artes. «Premio Nacional de Ciencias y Artes». Secretaría de Educación Pública. Consultado el 1 de diciembre de 2009.
10. ↑ Periodico La Jornada
11. ↑ Boletín de la Secretaría de Educación Pública
12. ↑ «José Emilio Pacheco gana el Premio Cervantes». El Universal (30 de noviembre de 2009). Consultado el 2 de mayo de 2010.
Bibliografía
En español
• José Emilio Pacheco : perspectivas críticas / Hugo J Verani., 2006
• Ensoñación cósmica : poética de El reposo de fuego de José Emilio Pacheco / Betina Bahía Diwan., 2004
• Dilemas de la poesía de fin de siglo : José Emilio Pacheco y Jaime Saenz / Elizabeth Pérez., 2001
• José Emilio Pacheco : poeta y cuentista posmoderno / José de Jesús Ramos., 1992
• El papel del lector en la novela mexicana contemporánea: José Emilio Pacheco/ Magda Graniela-Rodríguez., 1991
• José Emilio Pacheco : poética y poesía del prosaísmo / Daniel Torres., 1990
• La hoguera y el viento : José Emilio Pacheco ante la crítica / Hugo J Verani., 1987
• José Emilio Pacheco / Luis Antonio de Villena., 1986
• Ficción e historia : la narrativa de José Emilio Pacheco / Yvette Jiménez de Báez., 1979
En inglés
• Modern Spanish American poets. Second series / María Antonia Salgado., 2004
• José Emilio Pacheco and the poets of the shadows / Ronald J Friis., 2001
• Out of the volcano : portraits of contemporary Mexican artists / Margaret Sayers Peden., 1991
• Tradition and renewal : essays on twentieth-century Latin American literature and culture / Merlin H Forster., 1975
• The turning tides : the poetry of José Emilio Pacheco / Mary Kathryn Docter., 1991
• Time in the poetry of José Emilio Pacheco : images, themes, poetics / Judith Roman Topletz., 1983
Fragmetos leídos:
"Demolición"
"Los desairados"
"Fisura"
Julio Cortázar
Cortázar nació en la embajada de Argentina en Bélgica, en Ixelles, distrito de Bruselas, el 26 de agosto de 1914, hijo de Julio José Cortázar y María Herminia Descotte. Más adelante en su vida declararía: «Mi nacimiento [en Bruselas] fue un producto del turismo y la diplomacia». En ese entonces Bruselas estaba ocupada por los alemanes.
Siempre se afirmó cierta relación de su padre con el cuerpo diplomático argentino. Sus padres, María Herminia Descotte y Julio José Cortázar, eran argentinos. Hacia fines de la Primera Guerra Mundial, los Cortázar lograron pasar a Suiza gracias a la condición alemana de la abuela materna de Julio, y de allí, poco tiempo más tarde a Barcelona, donde vivieron un año y medio. A los cuatro años volvieron a Argentina y pasó el resto de su infancia en Banfield, en el sur del Gran Buenos Aires, junto a su madre, una tía y Ofelia, su única hermana (un año menor que él). Vivió en una casa con fondo (Los Venenos, Deshoras, están basados en sus recuerdos infantiles), pero no fue totalmente feliz. «Mucha servidumbre, excesiva sensibilidad, una tristeza frecuente» (Carta a Graciela M. de Sola, París, 4 de noviembre de 1963). Conoció, gracias a su madre, al escritor a quien admiraría por el resto de su vida: Julio Verne.
«Pasé mi infancia en una bruma de duendes, de elfos, con un sentido del espacio y del tiempo diferente al de los demás» (revista Plural n°44, México 5/1975). Cortázar fue un niño enfermizo y pasó mucho tiempo en cama, por lo que la lectura fue su gran compañera. Su madre le seleccionaba lo que podía leer, convirtiéndose en la gran iniciadora de su camino de lector, primero, y de escritor después. Declaró: «Mi madre dice que empecé a escribir a los ocho años, con una novela que guarda celosamente a pesar de mis desesperadas tentativas por quemarla» (revista Siete Días, Buenos Aires, 12/1973). Cortázar también recuerda que en cierta ocasión un pariente suyo (un tío o algo así) descubrió una serie de poemas suyos y se los dio a su madre, diciéndole que evidentemente esos poemas no eran míos, que yo lo los copiaba, de alguna antología de poemas, por lo cual su madre llegó a preguntarle si esos poemas realmente eran suyos. 2 Leía tanto que algún médico llegó a recomendarle leer menos durante cinco o seis meses y salir más a tomar un poco de sol. Muchos de sus cuentos son autobiográficos, como Bestiario, Final del juego, Los venenos o La Señorita Cora, entre otros.
Juventud
Se forma como Maestro Normal en 1932 y Profesor Normal en Letras en 1935 en la Escuela Normal de Profesores Mariano Acosta, de aquellos años surgieron La Escuela de Noche (Deshoras). En aquella época, comenzó a frecuentar los estadios a ver boxeo, donde ideó una especie de filosofía del box «eliminando el aspecto sangriento y cruel que provoca tanto rechazo y cólera» (La fascinación de las palabras). Admiraba al hombre que siempre iba para adelante y a pura fuerza y coraje conseguía ganar (Torito, Final del juego).
Un día, en 1932, caminando por el centro de Buenos Aires, se topó con un libro de Jean Cocteau, un total desconocido para él hasta aquel momento, titulado Opio, Diario de una desintoxicación. Aquella lectura lo marcaría para el resto de su vida: «Sentí que toda una etapa de vida literaria estaba irrevocablemente en el pasado… desde ese día leí y escribí de manera diferente, ya con otras ambiciones, con otras visiones» (La fascinación de las palabras, 1997).
Comenzó en la Universidad de Buenos Aires sus estudios de Filosofía, aprobó el primer año, pero comprendió que debía utilizar el título que ya tenía para trabajar y ayudar a su madre. Dictó clases en Bolívar, Saladillo (Ciudad en cual figura en su Libreta Cívica como oficina de enrolamiento); y luego en Chivilcoy. Vivió en cuartos solitarios de pensiones aprovechando todo el tiempo libre para leer y escribir (Distante espejo). En 1944 se traslada a Cuyo, Mendoza, y en su Universidad imparte cursos de Literatura Francesa. Publica su primer cuento, Bruja, en la revista Correo Literario. Participa en manifestaciones de oposición al peronismo. En 1945, cuando Juan Domingo Perón gana las elecciones presidenciales presenta su renuncia. "Preferí renunciar a mis cátedras antes de verme obligado a 'sacarme el saco' como les pasó a tantos colegas que optaron por seguir en sus puestos." Reúne un primer volumen de cuentos, La otra orilla. Regresa a Buenos Aires, donde comienza a trabajar en la Cámara Argentina del Libro. En 1946 publica el cuento "Casa tomada" en la revista Los Anales de Buenos Aires, dirigida por Jorge Luis Borges. Ese mismo año publica un trabajo sobre el poeta inglés John Keats, "La urna griega" en la poesía de John Keats en la Revista de Estudios Clásicos de la Universidad de Cuyo. En 1947 colabora en varias revistas, entre ellas en Realidad. Publica un importante trabajo teórico, "Teoría del Túnel", y en la revista Los Anales de Buenos Aires aparece publicado su cuento Bestiario. En 1948 obtiene el título de traductor público de inglés y francés, tras cursar en apenas nueve meses estudios que normalmente insumen tres años. El esfuerzo le provoca síntomas neuróticos, uno de los cuales (la búsqueda de cucarachas en la comida) desaparece con la escritura de un cuento, "Circe", que junto con Casa Tomada y Bestiario (aparecidos en Los anales de Buenos Aires) será incluido más adelante en Bestiario. En 1949 publica el poema dramático Los Reyes, primera obra firmada con su nombre real e ignorado por la crítica. Durante el verano escribe una primera novela, "Divertimento", que de alguna manera prefigura Rayuela. Divertimento será publicada sólo en 1986, después de su muerte. Colabora en revistas culturales de Buenos Aires (Cabalgata, Realidad y Sur) En 1950 escribe otra novela, El examen, rechazada por el asesor literario de la Editorial Losada, Guillermo de Torre. Cortázar la presentará a un concurso convocado por la misma editorial, sin éxito. Esta novela también será editada tras la muerte del escritor, en 1986. En 1951 publicó Bestiario, una colección de ocho relatos que le valieron cierto reconocimiento en el ambiente local. Poco después, disconforme con el gobierno de Juan Domingo Perón, decide trasladarse a París, ciudad donde, salvo esporádicos viajes por Europa y América Latina, residiría durante el resto de su vida.
Matrimonio
Se casó con Aurora Bernárdez en 1953, una traductora argentina. Vivían en París con condiciones económicas bajas y le surgió el ofrecimiento de traducir la obra completa, en prosa, de Edgar Allan Poe para la Universidad de Puerto Rico. Dicho trabajo sería considerado luego por los críticos como la mejor traducción de la obra del escritor estadounidense. Juntos se fueron a vivir a Italia durante el año que duró el trabajo, luego viajaron a Buenos Aires en barco y Cortázar se pasó el trayecto escribiendo en su máquina portátil una nueva novela. «La revolución cubana… me mostró de una manera cruel y que me dolió mucho el gran vacío político que había en mí, mi inutilidad política… los temas políticos se fueron metiendo en mi literatura...» (La fascinación de las palabras). En 1963 visitó Cuba invitado por Casa de las Américas para ser jurado en un concurso. Ya nunca dejaría de interesarse por la política latinoamericana. En ese mismo año aparece lo que sería su mayor éxito editorial y le valdría el reconocimiento de ser parte del boom latinoamericano: Rayuela, la que se convirtió en un clásico de la literatura argentina. Según declaró en una carta a Manuel Antín en agosto de 1964, ese no iba a ser el nombre de su novela sino Mandala: «De golpe comprendí que no hay derecho a exigirle a los lectores que conozcan el esoterismo búdico o tibetano»; pero no estaba arrepentido por el cambio.
En 1967, rompe su vínculo con Bernárdez y toma por pareja a la lituana Ugné Karvelis, con quien nunca contrajo matrimonio, pero quien le inculcó un gran interés por la política.
Con su tercera pareja y segunda esposa, la escritora canadiense Carol Dunlop, realizó numerosos viajes, uno de los primeros fue a Polonia, donde participó de un congreso de solidaridad con Chile. Otro de los viajes que hizo junto a Carol Dunlop fue plasmado en el libro Los autonautas de la cosmopista que cuenta el trayecto de la pareja por la autopista París-Marsella. Tras la muerte de Carol Dunlop, la última esposa de Cortázar, Aurora Bernárdez lo acompañaría durante su enfermedad. Actualmente ella es la única heredera de su obra publicada y de sus textos.
Cortázar social
Los derechos de autor de varias de sus obras fueron donados para ayudar a los presos políticos de varios países, entre ellos Argentina. En una carta a su amigo Francisco Porrúa de febrero de 1967, confesó: «El amor de Cuba por el Che me hizo sentir extrañamente argentino el 2 de enero, cuando el saludo de Fidel en la plaza de la Revolución al comandante Guevara, allí donde esté, desató en 300.000 hombres una ovación que duró diez minutos».
En noviembre de 1970 viajó a Chile, donde se solidarizó con el gobierno de Salvador Allende y pasó unos días para visitar a su madre y amigos, «y ahí el delirio fue una especie de pesadilla diurna» contó en una carta a Gregory Rabassa.
En 1971 fue «excomulgado»[cita requerida] por Fidel Castro, junto a otros escritores, por pedir información sobre el arresto del poeta Heberto Padilla. A pesar de su desilusión con la actitud de Castro, siguió de cerca la situación política de Latinoamérica. En 1973, fue galadornado con el Premio Médicis por su Libro de Manuel y destinó sus derechos a la ayuda de los presos políticos en Argentina. En 1974, fue miembro del Tribunal Bertrand Russell II reunido en Roma para examinar la situación política en América Latina, en particular las violaciones de los Derechos Humanos.
Su obra poética
A pesar de ser reconocido por su narrativa, escribió gran cantidad de poemas en prosa (en libros mixtos como Historias de cronopios y de famas, Un tal Lucas, Último round); e incluso poemas en verso (Presencia, Pameos y meopas, Salvo el crepúsculo). Colaboró en muchas publicaciones en distintos países, grabó sus poemas y cuentos, escribió letras de tangos (por ejemplo con el Tata Cedrón) y le puso textos a libros de fotografías e historietas.
Nicaragua
En 1976, viaja a Costa Rica donde se encuentra con Sergio Ramírez y Ernesto Cardenal y emprende un viaje clandestino y plagado de peripecias hacia la localidad de Solentiname en Nicaragua. Este viaje lo marcará para siempre y será el comienzo de una serie de visitas a este país.
Justamente luego del triunfo de la revolución sandinista viaja reiteradas veces a dicho país y conoce de cerca el proceso y la realidad nicaragüense y latinoamericana. Estas experiencias darán como resultado una serie de textos que serán recopilados en el libro Nicaragua, tan violentamente dulce.
Archivo:Julio Cortázar.JPG
Tumba de Cortázar en Montparnase, París. Sobre la lápida se yergue la imagen de un cronopio, personaje creado por el escritor
Enfermedad y muerte
En agosto de 1981 sufrió una hemorragia gástrica y salvó su vida de milagro. Nunca dejó de escribir, fue su pasión aún en los momentos más difíciles. En 1983, vuelta la democracia en Argentina, Cortázar hace un último viaje a su patria, donde es recibido cálidamente por sus admiradores, que lo paran en la calle y le piden autógrafos, en contraste con la indiferencia de las autoridades nacionales. Después de visitar a varios amigos, regresa a París. Poco después François Mitterrand le otorga la nacionalidad francesa.
Carol Dunlop había fallecido el 2 de noviembre de 1982, sumiendo a Cortázar en una profunda depresión. Julio murió el 12 de febrero de 1984 a causa de una leucemia. Dos días después, fue enterrado en el cementerio de Montparnasse, en la misma tumba donde yacía Carol. La lápida y la escultura que adornan la tumba fueron hechas por sus amigos, los artistas Julio Silva y Luis Tomasello [1]. Es costumbre dejar una copa o un vaso de vino y una hoja de papel o un billete de metro con una rayuela dibujada.
Reconocimiento
• En Buenos Aires, la pequeña plaza situada en la intersección de las calles Serrano y Honduras lleva su nombre.
• La escuela secundaria básica n.º 13 se llama «Julio Cortázar» en su honor.
• En 1984 la Fundación Konex le otorga a su figura fallecida el Premio Konex de Honor por su gran aporte a la historia de la literatura argentina.
• La Universidad de Guadalajara, inauguró, el 12 de octubre de 1994, la Cátedra Latinoamericana Julio Cortázar, en honor al escritor. Dicha inauguración contó con la presencia del escritor mexicano Carlos Fuentes, del colombiano Gabriel García Márquez y de la viuda de Cortázar, Aurora Bernárdez. Esta cátedra rinde homenaje a la memoria, la persona, la obra y las preocupaciones intelectuales que rigieron la vida del argentino.
• La escuela del partido de Ituzaingó (en la zona oeste del Gran Buenos Aires y en Capital Federal, el colegio secundario Nº 1 D.E 12, situado en Flores. En la ciudad de Florencio Varela, al sur del Gran Buenos Aires, existe la Escuela de Educación Media Nro 8 Julio Cortázar.
• En 2007 el alcalde socialista de París, Bertrand Delanoë dio oficialmente el nombre de Place Julio Cortázar a la pequeña plazoleta en el extremo occidental de la Île Saint-Louis donde transcurre el relato Las Babas del Diablo.
«Yo creo que desde muy pequeño mi desdicha y mi dicha, al mismo tiempo, fue el no aceptar las cosas como me eran dadas. A mí no me bastaba con que me dijeran que eso era una mesa, o que la palabra madre era la palabra madre y ahí se acaba todo. Al contrario, en el objeto mesa y en la palabra madre empezaba para mí un itinerario misterioso que a veces llegaba a franquear y en el que a veces me estrellaba. En suma, desde pequeño, mi relación con las palabras, con la escritura, no se diferencia de mi relación con el mundo en general. Yo parezco haber nacido para no aceptar las cosas tal como me son dadas.»
Julio Cortázar.
Bibliografía
Cuentos y misceláneas
• La otra orilla, 1945
• Bestiario, 1951 (cuentos)
• Final del juego, 1956 (cuentos)
• Las armas secretas, 1959 (cuentos)
• Historias de cronopios y de famas, 1962 (misceláneas)
• Carta a una señorita en París , 1963
• Todos los fuegos el fuego, 1966 (cuentos)
• La vuelta al día en ochenta mundos, 1967 (misceláneas)
• El perseguidor y otros cuentos, 1967 (cuentos)
• La isla a mediodía y otros relatos, 1971
• Octaedro, 1974 (cuentos)
• Alguien que anda por ahí, 1977 (cuentos)
• Un tal Lucas, 1979 (cuentos)
• Territorios, 1979 (cuentos)
• Queremos tanto a Glenda, 1980 (cuentos)
• Deshoras, 1982 (cuentos)
• El perseguidor, 2009 (cuento ilustrado, Libros del Zorro Rojo)
• La noche boca arriba, (cuento)
Novelas
• Los premios, 1960
• Rayuela, 1963
• 62/modelo para armar, 1968
• Libro de Manuel, 1973
• El examen, 1986 (escrita en 1950)
• Divertimento, 1986 (escrita en 1960)
• Diario de Andrés Fava, 1995 (obra póstuma)
Teatro
• Los reyes, 1949 (con el seudónimo de Julio Denis)
• Adiós Robinson y otras piezas breves, 1995 (obra póstuma)
Poesía
• Presencia, 1938 (sonetos, con el seudónimo de Julio Denis)
• Pameos y meopas, 1971
• Salvo el crepúsculo, 1984
Otros
• La autopista del Sur, 1964
• Buenos Aires, Buenos Aires, 1967
• Último round, 1969
• Viaje alrededor de una mesa, 1970
• Prosa del observatorio, 1972
• La casilla de los Morelli, 1973
• Fantomas contra los vampiros multinacionales, cómic, 1975
• Estrictamente no profesional, 1976
• Los autonautas de la cosmopista, 1982 (con Carol Dunlop)
• Nicaragua tan violentamente dulce, 1983.
• Silvalandia (basado en ilustraciones de Julio Silva), 1984
• Imagen de John Keats (obra póstuma, escrita entre 1951 y 1952)
• Correspondencia Cortázar-Dunlop-Monrós, Alpha Decay, Barcelona, 2009 (obra póstuma)
• Papeles inesperados, Alfaguara, 2009 (obra póstuma)
• Cartas a los Jonquières, Alfaguara, 2010 (obra póstuma)
Audio libros
• Cortázar lee a Cortázar, 1966
• Voz de América Latina, 1968
• Cortázar por él mismo, un libro sonoro, 1970
• Casa de las Américas, 1978
Filmografía
• Cortázar, 1994. Documental dirigido por Tristán Bauer.
• Cortázar, apuntes para un documental, 2002. Documental dirigido por Eduardo Montes-Bradley.
• Graffiti, 2005. Cortometraje basado en el relato corto Graffiti. Dirigido por Pako González. Primera parte, segunda parte
• Blow-Up, 1966. Dirigida por Michelangelo Antonioni, con David Hemmings, Vanessa Redgrave, Sarah Miles, Peter Bowles y Veruschka von Lehndorff. Basada en el texto Las babas del diablo. Cortázar aparece como cameo en una de las fotografías mostradas en la película.
• Mentiras piadosas, 2008. Dirigida por Diego Sabanés. Versión libre del texto La salud de los enfermos. Tráiler
Fragmento leído: "Manual de instrucciones" "Instrucciones para subir una escalera" "Instrucciones para cantar"
"Instrucciones para dar cuerda a un reloj"
Piensa en esto: cuando te regalan un reloj te regalan un pequeño infierno florido, una cadena de rosas, un calabozo de aire. No te dan solamente el reloj, que los cumplas muy felices y esperamos que te dure porque es de buena marca, suizo con áncora de rubíes; no te regalan solamente ese menudo picapedrero que te atarás a la muñeca y pasearás contigo. Te regalan —no lo saben, lo terrible es que no lo saben—, te regalan un nuevo pedazo frágil y precario de ti mismo, algo que es tuyo pero no es tu cuerpo, que hay que atar a tu cuerpo con su correa como un bracito desesperado colgándose de tu muñeca. Te regalan la necesidad de darle cuerda todos los días, la obligación de darle cuerda para que siga siendo un reloj; te regalan la obsesión de atender a la hora exacta en las vitrinas de las joyerías, en el anuncio por la radio, en el servicio telefónico. Te regalan el miedo de perderlo, de que te lo roben, de que se te caiga al suelo y se rompa. Te regalan su marca, y la seguridad de que es una marca mejor que las otras, te regalan la tendencia de comparar tu reloj con los demás relojes. No te regalan un reloj, tú eres el regalado, a ti te ofrecen para el cumpleaños del reloj.
Instrucciones para dar cuerda al reloj
Allá al fondo está la muerte, pero no tenga miedo. Sujete el reloj con una mano, tome con dos dedos la llave de la cuerda, remóntela suavemente. Ahora se abre otro plazo, los árboles despliegan sus hojas, las barcas corren regatas, el tiempo como un abanico se va llenando de sí mismo y de él brotan el aire, las brisas de la tierra, la sombra de una mujer, el perfume del pan.
¿Qué más quiere, qué más quiere? Átelo pronto a su muñeca, déjelo latir en libertad, imítelo anhelante. El miedo herrumbra las áncoras, cada cosa que pudo alcanzarse y fue olvidada va corroyendo las venas del reloj, gangrenando la fría sangre de sus rubíes. Y allá en el fondo está la muerte si no corremos y llegamos antes y comprendemos que ya no importa.
Autoevaluación de la clase
En el día de hoy realizamos un ejercicio sobre la última lectura del autor Julio Cortázar Manual de instrucciones, el cual consistía en realizar unas instrucciones para algún oficio inútil o que nadie quisiera hacer, éste es el mio la verdad no es muy creativo pero lo intenté:
Manual para dejarse robar
Primero salga a la calle preferiblemente con dinero o todos los artículos de valor para que no lo chucen, lo rayen o como se dice comummente no lo maten.
Transite por lugares seguros de robo como el Parque Berrío, el puente colombia, pasaje la veracruz o los buses Transmedellín, lo fundamental es demostrar el miedo, si tiene bolso camine observando repetidamente el entorno para que noten sus nervios, cuando se le acerque el profesional en robo grite constantemente,pidale que le deje los pasajes para el bus o la sim del celular, luche y rindase porque sabe que de todos modos la atracaran, luego cuentele a todos sus familiares y finalmente espere a que le apaguen el celular o le llegue plata para que reponga lo que le quitaron.
La clase me pareció súper pues realizamos éste ejercicio que es divertido y poco inusual, lo que hace que se rompa la linealidad que se ha mantenido durante la materia, me parecio importante practicarlo pues de ésto podemos aprender cómo el escribir cosas idiotas nos puede servir a mejorar el proceso de escritura, además nos podemos liberar de muchas cosas que tenemos en la mente y hacer por que no algo divertido, con sentido y apto para leer.
Cibergrafía
http://www.wikipedia.com
http://www.sololiteratura.com/cor/manualdeinstrucciones.html
miércoles, 15 de septiembre de 2010
portafolio de desempeño
GRANDES MINICUENTOS
Lecturas realizadas en clase:
Jaime Jaramillo Escobar: “La poesía y la vida”, “Método fácil y rápido para ser poeta” Jaime Sabines: Fragmento “Diario semanario”
Julio Cortázar: “Instrucciones y ejemplos sobre la forma de tener miedo”
Nació en el 26 de agosto de 1914 en Bruselas. Hijode padres argentinos, llegó por primera vez a Buenos Aires a los cuatro años. Crecióen Bánfield, se graduó como licenciado en letras y maestro de escuela. Se le considera uno de los autores más innovadores y originales de su tiempo, maestro del relato corto, la prosa poética y la narración breve en general, comparable a Jorge Luís Borges, Antón Chéjov o Edgar Allan Poe, y creador de importantes novelas que inauguraron una nueva forma de hacer literatura en Latinoamérica, rompiendo los moldes clásicos mediante narraciones que escapan de la linealidad temporal y donde los personajes adquieren una autonomía y una profundidad psicológica pocas veces vista hasta entonces.Vivió buena parte de su vida en París, ciudad en la que se estableció en 1951, en la que ambientó algunas de sus obras, y donde finalmente murió.
Eduardo Galeano: “El libro de los abrazos”
Periodista y escritor uruguayo, ganador del premio Stig Dagerman. Es considerado actualmente como uno de los más destacados escritores de la uruguaya. Sus libros han sido muy traducidos. Sus más conocidos, Memoria del fuego (1986) y Las venas abiertas de América Latina (1971), han sido traducidos a veinte idiomas. Sus trabajos trascienden géneros ortodoxos, combinando documental, ficción, periodismo, análisis político e historia.
Oliverio Girondo
Poeta argentino nacido en Buenos Aires en 1891, en el seno de una familia adinerada que le procuró una esmerada educación en importantes centros educativos europeos. Estudió Derecho, y muy pronto, a raíz de sus contactos con los poetas exponentes de la vanguardia europea, publicó en 1922 su primer libro de poemas, «Veinte poemas para ser leídos en el tranvía», seguidos luego por «Calcomanías» en 1925, «Espantapájaros» en 1932, «Persuasión de los días» en 1942, «Campo nuestro» en 1946 y «En la masmédula» en 1954, obra que constituye en su trabajo más audaz en el campo de la poesía. Al iniciarse la década de los años cincuenta, guiado por su interés en las artes plásticas, incursionó en la pintura con una marcada tendencia surrealista, gracias a su profundo conocimiento de la pintura francesa. En 1961 sufrió un grave accidente que le disminuyó sus condiciones físicas. En 1965 viajó por última vez a Europa y a su regreso a Buenos Aires, falleció en 1967.
Virgilio Piñera: “El infierno”
Fue un poeta, narrador y dramaturgo cubano.Es considerado el más grande autor teatral cubano del siglo XX. Se estableció en La Habana en 1938 y en 1940 obtuvo el título de Doctor en Filosofía y Letras en la Universidad capitalina. Fundó y dirigió la revista Poeta (1942).
Augusto Monteroso: “Caballo imaginando a Dios”
Nació el 21 de diciembre de 1921 en Tegucigalpa, capital de Honduras. Sin embargo, a los 15 años su familia se estableció en Guatemala y desde 1944 fijó su residencia en México, al que se trasladó por motivos políticos. Narrador y ensayista, empezó a publicar sus textos a partir de 1959, año en que se publica la primera edición de Obras completas (y otros cuentos), conjunto de incisivas narraciones donde comienzan a notarse los rasgos fundamentales de su narrativa: una prosa concisa, breve, aparentemente sencilla que sin embargo está llena de referencias cultas, así como un magistral manejo de la parodia, la caricatura y el humor negro.
CIBERGRAFÍA
http://www.biografiasyvidas.com/biografia/c/cortazar.htm
http://es.wikipedia.org/wiki/Julio_Cort%C3%A1zar
http://es.wikipedia.org/wiki/Eduardo_Galeano
http://amediavoz.com/girondo.htm
http://www.cniae.cult.cu/Virgilio_Pinera_biografia.htm
http://es.wikipedia.org/wiki/Augusto_Monterroso
Autoevaluación de la clase
En el día de hoy se leyeron los minicuentos de los anteriores autores, yo no pude estar en el inicio de la clase pues me encontraba en el consejo de redacción del noticiero 1230 am noticias con el Decano Ancízar Vargas y mis otros compañeros, cuando llegué al salón ya habían socializado las obras elegidas y habían leído los minicuentos, después se realizó la lectura por grupos del documento "Teoría literaria: El acceso extrínseco al estudio de la literatura", realizando una relatoría o una lluvia de ideas del documento.
Personalmente creo que éste tipo de documentos es mejor leerlos en la casa pues se tiene más disponibilidad y se está más relajado para leerlo, mientras que en la clase por se tan extenso da pereza iniciar y hacer una relatoría, aunque sería lo ideal pero no es el espacio.
Hasta el momento las clases me han parecido muy buenas porque además que aprendo sobre teoría literaria, movimientos literarios y diferentes estilos de escritura, aprendemos a identificar el buen cine y como se el desarrollo poético y narrativo en la historia.
Lecturas realizadas en clase:
Jaime Jaramillo Escobar: “La poesía y la vida”, “Método fácil y rápido para ser poeta” Jaime Sabines: Fragmento “Diario semanario”
Julio Cortázar: “Instrucciones y ejemplos sobre la forma de tener miedo”
Nació en el 26 de agosto de 1914 en Bruselas. Hijode padres argentinos, llegó por primera vez a Buenos Aires a los cuatro años. Crecióen Bánfield, se graduó como licenciado en letras y maestro de escuela. Se le considera uno de los autores más innovadores y originales de su tiempo, maestro del relato corto, la prosa poética y la narración breve en general, comparable a Jorge Luís Borges, Antón Chéjov o Edgar Allan Poe, y creador de importantes novelas que inauguraron una nueva forma de hacer literatura en Latinoamérica, rompiendo los moldes clásicos mediante narraciones que escapan de la linealidad temporal y donde los personajes adquieren una autonomía y una profundidad psicológica pocas veces vista hasta entonces.Vivió buena parte de su vida en París, ciudad en la que se estableció en 1951, en la que ambientó algunas de sus obras, y donde finalmente murió.
Eduardo Galeano: “El libro de los abrazos”
Periodista y escritor uruguayo, ganador del premio Stig Dagerman. Es considerado actualmente como uno de los más destacados escritores de la uruguaya. Sus libros han sido muy traducidos. Sus más conocidos, Memoria del fuego (1986) y Las venas abiertas de América Latina (1971), han sido traducidos a veinte idiomas. Sus trabajos trascienden géneros ortodoxos, combinando documental, ficción, periodismo, análisis político e historia.
Oliverio Girondo
Poeta argentino nacido en Buenos Aires en 1891, en el seno de una familia adinerada que le procuró una esmerada educación en importantes centros educativos europeos. Estudió Derecho, y muy pronto, a raíz de sus contactos con los poetas exponentes de la vanguardia europea, publicó en 1922 su primer libro de poemas, «Veinte poemas para ser leídos en el tranvía», seguidos luego por «Calcomanías» en 1925, «Espantapájaros» en 1932, «Persuasión de los días» en 1942, «Campo nuestro» en 1946 y «En la masmédula» en 1954, obra que constituye en su trabajo más audaz en el campo de la poesía. Al iniciarse la década de los años cincuenta, guiado por su interés en las artes plásticas, incursionó en la pintura con una marcada tendencia surrealista, gracias a su profundo conocimiento de la pintura francesa. En 1961 sufrió un grave accidente que le disminuyó sus condiciones físicas. En 1965 viajó por última vez a Europa y a su regreso a Buenos Aires, falleció en 1967.
Virgilio Piñera: “El infierno”
Fue un poeta, narrador y dramaturgo cubano.Es considerado el más grande autor teatral cubano del siglo XX. Se estableció en La Habana en 1938 y en 1940 obtuvo el título de Doctor en Filosofía y Letras en la Universidad capitalina. Fundó y dirigió la revista Poeta (1942).
Augusto Monteroso: “Caballo imaginando a Dios”
Nació el 21 de diciembre de 1921 en Tegucigalpa, capital de Honduras. Sin embargo, a los 15 años su familia se estableció en Guatemala y desde 1944 fijó su residencia en México, al que se trasladó por motivos políticos. Narrador y ensayista, empezó a publicar sus textos a partir de 1959, año en que se publica la primera edición de Obras completas (y otros cuentos), conjunto de incisivas narraciones donde comienzan a notarse los rasgos fundamentales de su narrativa: una prosa concisa, breve, aparentemente sencilla que sin embargo está llena de referencias cultas, así como un magistral manejo de la parodia, la caricatura y el humor negro.
CIBERGRAFÍA
http://www.biografiasyvidas.com/biografia/c/cortazar.htm
http://es.wikipedia.org/wiki/Julio_Cort%C3%A1zar
http://es.wikipedia.org/wiki/Eduardo_Galeano
http://amediavoz.com/girondo.htm
http://www.cniae.cult.cu/Virgilio_Pinera_biografia.htm
http://es.wikipedia.org/wiki/Augusto_Monterroso
Autoevaluación de la clase
En el día de hoy se leyeron los minicuentos de los anteriores autores, yo no pude estar en el inicio de la clase pues me encontraba en el consejo de redacción del noticiero 1230 am noticias con el Decano Ancízar Vargas y mis otros compañeros, cuando llegué al salón ya habían socializado las obras elegidas y habían leído los minicuentos, después se realizó la lectura por grupos del documento "Teoría literaria: El acceso extrínseco al estudio de la literatura", realizando una relatoría o una lluvia de ideas del documento.
Personalmente creo que éste tipo de documentos es mejor leerlos en la casa pues se tiene más disponibilidad y se está más relajado para leerlo, mientras que en la clase por se tan extenso da pereza iniciar y hacer una relatoría, aunque sería lo ideal pero no es el espacio.
Hasta el momento las clases me han parecido muy buenas porque además que aprendo sobre teoría literaria, movimientos literarios y diferentes estilos de escritura, aprendemos a identificar el buen cine y como se el desarrollo poético y narrativo en la historia.
miércoles, 8 de septiembre de 2010
portafolio de desempeño
¿Y si nunca llega?
Un viejo adagio dice “más vale tarde que nunca”, pero ¿Y si nunca llega? Es curioso ver como los seres humanos tendemos a esperar por algo o alguien que sabemos jamás será para nosotros, pero como siempre decimos, la esperanza es lo último que se pierde.
Así como el coronel siguió esperando su carta de jubilación todos los viernes, los individuos tendemos a esperar toda la vida por el trabajo ideal, el hombre ideal, la casa ideal y todo aquello que según nosotros es la cima del bienestar, olvidándonos de las personas que están a nuestro alrededor, incluso de nosotros mismos, pues sólo vivimos por y para ese anhelo de alcanzar nuestros sueños.
Es interesante ver cómo el ser humano empieza a sacrificar su vida, a despojarse de todo por alcanzar ese estado que siempre se ha idealizado, ya sea porque cree que se lo merece o porque siempre le persuadieron con esa idea, pues como lo vemos en la historia de “El coronel no tiene quien le escriba” al personaje principal no le importa para nada que se esté “pudriendo vivo” como dice su mujer, pues se gasta el dinero en el maíz para el gallo y en café, todo con la esperanza que el animal se valorice para venderlo y así sobrevivir mientras llega su pensión.
Cuando un sujeto llega a éstos extremos de sólo vivir para obtener si quiera algo de sus sueños, es necesario replantear la idea de la importancia que esto tiene en nuestra vida y si realmente el sacrificio que estamos haciendo por eso puede llegar a tener el resultado esperado, que no sea peor el remedio que la enfermedad.
Somos seres de impulsos, que actuamos con el corazón y no con la razón, pero hay ocasiones que se hace necesario combinar estos dos elementos, para que nuestras decisiones no afecten a los demás ni a nosotros mismos, teniendo en cuenta que si lo esperado nunca nos llegará, de nada sirve realizar grandes sacrificios, así lo único que lograremos es ocultar la realidad, mi realidad y así descuidaremos los otros aspectos de nuestra vida negándonos a las otras posibilidades que podemos encontrar.
¿En realidad es necesario volver nuestra vida tan miserable por algo que sabemos o sospechamos nunca será? Si llega maravilloso pero ¿y si nunca llega?
Auto evaluación de la clase
En el día de hoy realizamos la socialización de los respectivos ensayos de acuerdo a las obras de literatura contemporánea colombiana, la obra que yo escogí fue "El coronel no tiene quien le escriba" del escritor y periodista Gabriel García Márquez, me pareció muy interesante el hecho de esperar con tanta pasión y esperanza algo que sabemos nunca será pero que igual lo seguimos esperando, los ensayos que se leyeron fueron muy buenos, en espercial el de la compañera Alejandra Saldarriaga y el de la compañera Indira, pues tenían una textura narrativa muy buena que despertaba interés en leer el texto mientras que otros se sabía que no lo leyeron por la forma en la cual lo leyeron y el desorden de las ideas.
La clase me pareció muy buena porque aprendí cosas muy buenas de mis compañeros, cómo debo escribir y que cosas debo evitar,espero seguir extrayendo las cosas buenas y aunque no me agraden algunas personas o algunas acciones de ellos tener siempre presente lo bueno que ellos me pueden aportar a mi experiencia profesional.
Un viejo adagio dice “más vale tarde que nunca”, pero ¿Y si nunca llega? Es curioso ver como los seres humanos tendemos a esperar por algo o alguien que sabemos jamás será para nosotros, pero como siempre decimos, la esperanza es lo último que se pierde.
Así como el coronel siguió esperando su carta de jubilación todos los viernes, los individuos tendemos a esperar toda la vida por el trabajo ideal, el hombre ideal, la casa ideal y todo aquello que según nosotros es la cima del bienestar, olvidándonos de las personas que están a nuestro alrededor, incluso de nosotros mismos, pues sólo vivimos por y para ese anhelo de alcanzar nuestros sueños.
Es interesante ver cómo el ser humano empieza a sacrificar su vida, a despojarse de todo por alcanzar ese estado que siempre se ha idealizado, ya sea porque cree que se lo merece o porque siempre le persuadieron con esa idea, pues como lo vemos en la historia de “El coronel no tiene quien le escriba” al personaje principal no le importa para nada que se esté “pudriendo vivo” como dice su mujer, pues se gasta el dinero en el maíz para el gallo y en café, todo con la esperanza que el animal se valorice para venderlo y así sobrevivir mientras llega su pensión.
Cuando un sujeto llega a éstos extremos de sólo vivir para obtener si quiera algo de sus sueños, es necesario replantear la idea de la importancia que esto tiene en nuestra vida y si realmente el sacrificio que estamos haciendo por eso puede llegar a tener el resultado esperado, que no sea peor el remedio que la enfermedad.
Somos seres de impulsos, que actuamos con el corazón y no con la razón, pero hay ocasiones que se hace necesario combinar estos dos elementos, para que nuestras decisiones no afecten a los demás ni a nosotros mismos, teniendo en cuenta que si lo esperado nunca nos llegará, de nada sirve realizar grandes sacrificios, así lo único que lograremos es ocultar la realidad, mi realidad y así descuidaremos los otros aspectos de nuestra vida negándonos a las otras posibilidades que podemos encontrar.
¿En realidad es necesario volver nuestra vida tan miserable por algo que sabemos o sospechamos nunca será? Si llega maravilloso pero ¿y si nunca llega?
Auto evaluación de la clase
En el día de hoy realizamos la socialización de los respectivos ensayos de acuerdo a las obras de literatura contemporánea colombiana, la obra que yo escogí fue "El coronel no tiene quien le escriba" del escritor y periodista Gabriel García Márquez, me pareció muy interesante el hecho de esperar con tanta pasión y esperanza algo que sabemos nunca será pero que igual lo seguimos esperando, los ensayos que se leyeron fueron muy buenos, en espercial el de la compañera Alejandra Saldarriaga y el de la compañera Indira, pues tenían una textura narrativa muy buena que despertaba interés en leer el texto mientras que otros se sabía que no lo leyeron por la forma en la cual lo leyeron y el desorden de las ideas.
La clase me pareció muy buena porque aprendí cosas muy buenas de mis compañeros, cómo debo escribir y que cosas debo evitar,espero seguir extrayendo las cosas buenas y aunque no me agraden algunas personas o algunas acciones de ellos tener siempre presente lo bueno que ellos me pueden aportar a mi experiencia profesional.
miércoles, 1 de septiembre de 2010
PORTAFOLIO DE DESEMPEÑO
EL SECRETO DE SUS OJOS
El secreto de sus ojos es una película argentina dirigida por Juan José Campanella, basada en la novela La pregunta de sus ojos, de Eduardo Sacheri. Está protagonizada por Ricardo Darín, Soledad Villamil, Pablo Rago y Javier Godino, y cuenta con la participación especial de Guillermo Francella. Producida con capital argentino y español, logró ser la película argentina más exitosa del año 2009 y la segunda más taquillera de la historia del cine argentino, con más de dos millones y medio de espectadores, y en 2010 se convirtió en la segunda película argentina en ganar el Óscar a la mejor película extranjera, después de La historia oficial.
La historia, situada en 1999, es contada en forma de recuerdo: en junio de 1974, un agente de la justicia federal, Benjamín Espósito (Ricardo Darín), empieza a investigar el crimen de una joven mujer, Lilliana Colotto de Morales, brutalmente violada y asesinada dentro de su casa en un barrio de Buenos Aires. Su esposo, ahora viudo, Ricardo Morales (Pablo Rago), queda devastado por la noticia; Espósito le promete encontrar al asesino y llevarlo ante la justicia. Éste es ayudado por su asistente alcóholico, Pablo Sandoval (Guillermo Francella), y la recién llegada Irene Menéndez-Hastings (Soledad Villamil), una joven de clase acomodada que es la nueva jefa del departamento. El rival de Espósito en el tribunal, Romano, acusa a dos trabajadores inmigrantes para deshacerse del asunto, lo cual enoja a Espósito tras ver que ambos fueron torturados para que se declararan culpables y se enfrenta a Romano en un ataque de furia.
Pronto, Espósito encuentra una pista al mirar unas viejas fotos de la joven asesinada, que le fueron dadas por Morales: en muchas de las fotos encuentra a un hombre, identificado como Isidoro Gómez, que miraba a la víctima de forma sospechosa. Espósito investiga a Gómez, y determina que vive y trabaja en Buenos Aires, pero no logra localizarlo.
Espósito y Sandoval entran ilegalmente en la casa de la madre de Gómez en Chivilcoy, ciudad donde no sólo nació él, sino también la difunta esposa de Morales. Durante el allanamiento, encuentran unas cartas que el sospechoso le escribió a su madre. Sandoval las roba, Esposito se entera manejando de regreso. De vuelta a la Capital Federal, la "visita" sólo les causa problemas con sus superiores, y no logran conseguir ninguna evidencia en las cartas. Además, Gómez sigue en libertad debido a una descuidada llamada telefónica a su madre por parte de Morales, quien desesperadamente quería encontrar al asesino de su esposa. Tras estos sucesos, la investigación del homicidio de la joven es cerrada.
Sin embargo, tiempo después, ya en 1975 Espósito se encuentra a Morales en una estación de trenes en Belgrano y descubre que por todo un año Morales había estado yendo a distintas estaciones de tren en capital federal para tratar de encontrar a Gómez cuando este vuelve del trabajo. Conmovido por la determinación de Morales y el amor de este por su difunta mujer, Espósito logra convencer a Irene de que reabra la investigación. Mientras emborrachándose en un bar, Sandoval hace un descubrimiento: un conocido suyo del bar identifica varios nombres mencionados en las cartas -sin conexión aparente- como jugadores de fútbol pertenecientes a Racing Club de Avellaneda.
Después de identificarlo como fanático de Racing, Espósito y Sandoval van a un partido entre ese equipo y Huracán, con la esperanza de encontrar a Gómez. En una escena memorable filmada en el estadio de este último equipo, lo localizan entre la multitud, pero un gol repentino causa el barullo suficiente para que huya. Una persecución comienza en la que Gómez casi escapa, pero es finalmente atrapado gracias a la asistencia de la policía cuando él se mete accidentalmente en la mitad del campo de fútbol. Espósito e Irene entonces lo someten a una falsa e ilegal interrogación en la oficina en la que Irene logra que Gómez confiese el crimen tras herir su orgullo masculino.
Gómez es juzgado y condenado, pero apenas un mes después Romano, el rival de Espósito, logra que liberen a Gómez y lo contrata como sicario para miembros de la facción de derecha del Partido Peronista para vengarse de Espósito. Espósito e Irene tratan de revertir esto pero la intervención de Romano no se los permite y a Espósito le cae la dura tarea de informar a Morales de que el asesino de su mujer seguirá libre, algo que devasta al hombre.
Semanas después, Sandoval se emborracha y se pelea con otro hombre en el bar que frecuenta y Espósito lo lleva hasta su propio departamento para que se ponga sobrio mientras él va a buscar a la mujer de su amigo. Cuando Espósito vuelve con la esposa de Sandoval a su departamento, encuentra la puerta forzada, sus fotos dadas vuelta y a Sandoval tiroteado y muerto en su cuarto. Espósito después concluye que Romano mandó asesinos a sueldo para tratar de matarlo a él y cuando encontraron a Sandoval, este dio vuelta las fotos y pretendió ser Espósito para salvar a su amigo.
Temiendo por su vida, Espósito es forzado a exiliarse a Jujuy con los primos de Irene para evitar a los asesinos de Romano. Este se va de la ciudad y se queda en Jujuy por diez años hasta volver a Buenos Aires en 1985 para encontrar Gómez desaparecido, a Romano asesinado durante la dictadura de 1976 y a Irene casada y con dos hijos.
Tratando de sacarle sentido al caso, Espósito va a visitar a Morales, quien se mudó en el '75 a una casa en la mitad de la nada en las afueras de la Provincia de Buenos Aires. Durante la visita, ambos hombres discuten varios de los eventos que ocurrieron durante y después del caso pero Morales se descontrola después de que Espósito le pregunta cómo hizo para sobrellevar la muerte de su mujer, y más aún la injusticia con la que finalizó su causa. Porque después de enterarse Esposito de que Gómez había terminado como guardaespaldas de Isabel Perón, a este no se lo volvió a ver. Morales le cuenta a Espósito que él ya se había encargado de secuestrar a Gómez y de tirotearlo en el baúl de su auto. Siendo así, Esposito se retira. Pero tras una profunda reflexión guiada por recuerdos, detiene el auto y se dirige campo adentro, de vuelta hacia la casa de Morales. Llegó a esto tras pensar en lo que Sandoval le había dicho "Nadie puede cambiar de pasión". Espósito comprendía el afán que tenía Morales por que Gómez sufriera una estadía eterna en prisión, y no se salvara instantáneamente con la muerte. Así llegó a la conclusión de que era imposible que el damnificado le "hubiera dado el gusto" a su agresor. Tras esperar hasta el anochecer, encuentra a Morales entrando en un pequeño granero con un plato de pequeños trozos de pan. Esposito avanza y mira por detrás de la puerta: Morales lleva ese plato a una celda de cuya oscuridad sale un "anciano" decrépito, quien resulta ser un añejo y maltrecho Gómez a quien Morales mantuvo preso y bien alimentado por 25 años pero ni una vez le dijo una sola palabra. Gómez dentro de su celda se aproxima a Esposito y le ruega que le pida a Morales que le hable. En ese momento Morales, con seriedad en su rostro le dice a Esposito: "Usted dijo perpetua", en referencia a la promesa de encarcelarlo que le había hecho.
De vuelta a Capital Federal, Espósito visita la tumba de Sandoval, y más tarde visita a Irene, dispuesto a confesarle su amor por ella, cosa que ella siempre ha esperado de él. Sonrientes y expectativos, los dos nuevos amantes entran en la oficina de ella y cierran la puerta para tener privacidad.
AUTOEVALUACIÓN
Hoy la clase me pareció muy buena pues vimos una película que en lo personal me pareció muy buena porque creo que hace enfásis en el poder de la observación y como el desarrollo de ésta cualidad puede hacer que nosotros como periodistas encontremos más fácil la verdad de los hechos tan sólo con una mirada nos podemos dar cuenta que intención tiene esa persona al decir cierta información.
Creo que otra cualidad que nos puede servir como pieza clave en nuestro oficio de periodistas es poder unir las piezas de la información para poder llevar a cabo la función de informar veraz y oportunamente, lo que llamo intuición, es algo fundamental en el trabajo investigativo.
Me parece que de ésta película se pueden hacer diversos análisis pues tiene una estructura narrativa increíble, creo que es una muestra del buen cine que además de entretener educa y forma.
Tomado de : http://www.wikipedia.com
El secreto de sus ojos es una película argentina dirigida por Juan José Campanella, basada en la novela La pregunta de sus ojos, de Eduardo Sacheri. Está protagonizada por Ricardo Darín, Soledad Villamil, Pablo Rago y Javier Godino, y cuenta con la participación especial de Guillermo Francella. Producida con capital argentino y español, logró ser la película argentina más exitosa del año 2009 y la segunda más taquillera de la historia del cine argentino, con más de dos millones y medio de espectadores, y en 2010 se convirtió en la segunda película argentina en ganar el Óscar a la mejor película extranjera, después de La historia oficial.
La historia, situada en 1999, es contada en forma de recuerdo: en junio de 1974, un agente de la justicia federal, Benjamín Espósito (Ricardo Darín), empieza a investigar el crimen de una joven mujer, Lilliana Colotto de Morales, brutalmente violada y asesinada dentro de su casa en un barrio de Buenos Aires. Su esposo, ahora viudo, Ricardo Morales (Pablo Rago), queda devastado por la noticia; Espósito le promete encontrar al asesino y llevarlo ante la justicia. Éste es ayudado por su asistente alcóholico, Pablo Sandoval (Guillermo Francella), y la recién llegada Irene Menéndez-Hastings (Soledad Villamil), una joven de clase acomodada que es la nueva jefa del departamento. El rival de Espósito en el tribunal, Romano, acusa a dos trabajadores inmigrantes para deshacerse del asunto, lo cual enoja a Espósito tras ver que ambos fueron torturados para que se declararan culpables y se enfrenta a Romano en un ataque de furia.
Pronto, Espósito encuentra una pista al mirar unas viejas fotos de la joven asesinada, que le fueron dadas por Morales: en muchas de las fotos encuentra a un hombre, identificado como Isidoro Gómez, que miraba a la víctima de forma sospechosa. Espósito investiga a Gómez, y determina que vive y trabaja en Buenos Aires, pero no logra localizarlo.
Espósito y Sandoval entran ilegalmente en la casa de la madre de Gómez en Chivilcoy, ciudad donde no sólo nació él, sino también la difunta esposa de Morales. Durante el allanamiento, encuentran unas cartas que el sospechoso le escribió a su madre. Sandoval las roba, Esposito se entera manejando de regreso. De vuelta a la Capital Federal, la "visita" sólo les causa problemas con sus superiores, y no logran conseguir ninguna evidencia en las cartas. Además, Gómez sigue en libertad debido a una descuidada llamada telefónica a su madre por parte de Morales, quien desesperadamente quería encontrar al asesino de su esposa. Tras estos sucesos, la investigación del homicidio de la joven es cerrada.
Sin embargo, tiempo después, ya en 1975 Espósito se encuentra a Morales en una estación de trenes en Belgrano y descubre que por todo un año Morales había estado yendo a distintas estaciones de tren en capital federal para tratar de encontrar a Gómez cuando este vuelve del trabajo. Conmovido por la determinación de Morales y el amor de este por su difunta mujer, Espósito logra convencer a Irene de que reabra la investigación. Mientras emborrachándose en un bar, Sandoval hace un descubrimiento: un conocido suyo del bar identifica varios nombres mencionados en las cartas -sin conexión aparente- como jugadores de fútbol pertenecientes a Racing Club de Avellaneda.
Después de identificarlo como fanático de Racing, Espósito y Sandoval van a un partido entre ese equipo y Huracán, con la esperanza de encontrar a Gómez. En una escena memorable filmada en el estadio de este último equipo, lo localizan entre la multitud, pero un gol repentino causa el barullo suficiente para que huya. Una persecución comienza en la que Gómez casi escapa, pero es finalmente atrapado gracias a la asistencia de la policía cuando él se mete accidentalmente en la mitad del campo de fútbol. Espósito e Irene entonces lo someten a una falsa e ilegal interrogación en la oficina en la que Irene logra que Gómez confiese el crimen tras herir su orgullo masculino.
Gómez es juzgado y condenado, pero apenas un mes después Romano, el rival de Espósito, logra que liberen a Gómez y lo contrata como sicario para miembros de la facción de derecha del Partido Peronista para vengarse de Espósito. Espósito e Irene tratan de revertir esto pero la intervención de Romano no se los permite y a Espósito le cae la dura tarea de informar a Morales de que el asesino de su mujer seguirá libre, algo que devasta al hombre.
Semanas después, Sandoval se emborracha y se pelea con otro hombre en el bar que frecuenta y Espósito lo lleva hasta su propio departamento para que se ponga sobrio mientras él va a buscar a la mujer de su amigo. Cuando Espósito vuelve con la esposa de Sandoval a su departamento, encuentra la puerta forzada, sus fotos dadas vuelta y a Sandoval tiroteado y muerto en su cuarto. Espósito después concluye que Romano mandó asesinos a sueldo para tratar de matarlo a él y cuando encontraron a Sandoval, este dio vuelta las fotos y pretendió ser Espósito para salvar a su amigo.
Temiendo por su vida, Espósito es forzado a exiliarse a Jujuy con los primos de Irene para evitar a los asesinos de Romano. Este se va de la ciudad y se queda en Jujuy por diez años hasta volver a Buenos Aires en 1985 para encontrar Gómez desaparecido, a Romano asesinado durante la dictadura de 1976 y a Irene casada y con dos hijos.
Tratando de sacarle sentido al caso, Espósito va a visitar a Morales, quien se mudó en el '75 a una casa en la mitad de la nada en las afueras de la Provincia de Buenos Aires. Durante la visita, ambos hombres discuten varios de los eventos que ocurrieron durante y después del caso pero Morales se descontrola después de que Espósito le pregunta cómo hizo para sobrellevar la muerte de su mujer, y más aún la injusticia con la que finalizó su causa. Porque después de enterarse Esposito de que Gómez había terminado como guardaespaldas de Isabel Perón, a este no se lo volvió a ver. Morales le cuenta a Espósito que él ya se había encargado de secuestrar a Gómez y de tirotearlo en el baúl de su auto. Siendo así, Esposito se retira. Pero tras una profunda reflexión guiada por recuerdos, detiene el auto y se dirige campo adentro, de vuelta hacia la casa de Morales. Llegó a esto tras pensar en lo que Sandoval le había dicho "Nadie puede cambiar de pasión". Espósito comprendía el afán que tenía Morales por que Gómez sufriera una estadía eterna en prisión, y no se salvara instantáneamente con la muerte. Así llegó a la conclusión de que era imposible que el damnificado le "hubiera dado el gusto" a su agresor. Tras esperar hasta el anochecer, encuentra a Morales entrando en un pequeño granero con un plato de pequeños trozos de pan. Esposito avanza y mira por detrás de la puerta: Morales lleva ese plato a una celda de cuya oscuridad sale un "anciano" decrépito, quien resulta ser un añejo y maltrecho Gómez a quien Morales mantuvo preso y bien alimentado por 25 años pero ni una vez le dijo una sola palabra. Gómez dentro de su celda se aproxima a Esposito y le ruega que le pida a Morales que le hable. En ese momento Morales, con seriedad en su rostro le dice a Esposito: "Usted dijo perpetua", en referencia a la promesa de encarcelarlo que le había hecho.
De vuelta a Capital Federal, Espósito visita la tumba de Sandoval, y más tarde visita a Irene, dispuesto a confesarle su amor por ella, cosa que ella siempre ha esperado de él. Sonrientes y expectativos, los dos nuevos amantes entran en la oficina de ella y cierran la puerta para tener privacidad.
AUTOEVALUACIÓN
Hoy la clase me pareció muy buena pues vimos una película que en lo personal me pareció muy buena porque creo que hace enfásis en el poder de la observación y como el desarrollo de ésta cualidad puede hacer que nosotros como periodistas encontremos más fácil la verdad de los hechos tan sólo con una mirada nos podemos dar cuenta que intención tiene esa persona al decir cierta información.
Creo que otra cualidad que nos puede servir como pieza clave en nuestro oficio de periodistas es poder unir las piezas de la información para poder llevar a cabo la función de informar veraz y oportunamente, lo que llamo intuición, es algo fundamental en el trabajo investigativo.
Me parece que de ésta película se pueden hacer diversos análisis pues tiene una estructura narrativa increíble, creo que es una muestra del buen cine que además de entretener educa y forma.
Tomado de : http://www.wikipedia.com
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